Los brotes verdes crecen tímidamente en el mercado laboral pontevedrés. La ciudad registró 5.508 parados el pasado mes de diciembre, lo que supone casi un 2% menos de los 5.619 que había en el mismo período de 2018. Las estadísticas de la Xunta revelan, además, que Pontevedra ha despedido el año con el mejor dato en términos de desempleo desde 2007. Entonces, la cifra de desocupados era menor: 4.569.
La mayor parte de los desocupados procede del sector servicios, que registra a 3.954 vecinos en esta situación. Representan al 71,4% del total de los vecinos que no tienen trabajo y que están anotados en las listas del antiguo Inem.
La otra cara de la moneda son los parados de larga duración. Las 495 personas que llevan más de un año sin empleo superan a las registradas en otros sectores, como la construcción (que el pasado mes de diciembre contabilizó 478), la industria (472) y la agricultura y la pesca (109).
Los sindicatos consideran que la estacionalidad, la rotación y la baja calidad en las contrataciones están detrás de la precariedad del mercado laboral en el país. "En Pontevedra tamén", señala el secretario comarcal de UGT, Ramón Vidal Trillo, que considera que es preciso derogar la reforma laboral aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2012.
El último informe del mercado laboral revela un mayor porcentaje entre las mujeres, que es del 58% (3.195 desempleadas). El nivel de paro en hombres se sitúa en el 42% (2.313 desocupados).
Los estudios tampoco parecen ser decisivos a la hora de encontrar empleo. Pontevedra contabilizó en diciembre a 880 parados con título universitario, la misma cifra que los que tienen FP. Por el contrario, el número de desempleados que cursaron Bachillerato, BUP o COU es menor: 532.
