El desarrollo de su proyecto de compostaje y el éxito de su huerto ecológico han llevado a que el Centro Integrado de Formación Profesional Carlos Oroza esté nominado al Concurso Estatal de Buenas Prácticas y opte al distintivo 'Sello Vida Saludable' del Ministerio de Educación.
Unos reconocimientos que llegan tras la apuesta del centro por el tratamiento sostenible de los residuos orgánicos generados en sus cocinas a través del compostaje y la aplicación del compost resultante en su huerto. Todo ello con un doble objetivo: producir nuevos alimentos de manera ecológica y formar a sus estudiantes no solo en las artes culinarias, sino también en el respeto al medio ambiente.
Manuel Hermo, director del CIFP, reitera: "É unha obriga ensinar ao noso alumnado esa responsabilidade co medio ambiente, ese ir cara a unha hostelería gastronómica sustentable e que isto, na medida das posibilidades, teña un impacto tanto dentro do centro e tamén nos lugares nos que o alumnado vai facer prácticas ou traballar".
Este proyecto se enmarca dentro del Plan Revitaliza puesto en marcha por la Deputación de Pontevedra y desde esta institución señalan con orgullo que el Carlos Oroza fue uno de los primeros centros en unirse al plan provincial.
El Concurso Estatal de 'Buenas Prácticas' está dotado de un premio por valor de 10.000 euros y el centro pontevedrés tiene posibilidades de ganarlo.
Por otro lado, el 'Sello Vida Saludable' busca "promover la comprensión y valoración de la importancia de preservar el medio ambiente".
