Agentes de la Policía Nacional han vuelto a detener al individuo que se hacía pasar por guardia civil para robar a vendedores de la Once en Marín y en Pontevedra. En este caso el juez ha dictado su ingreso incondicional en prisión, pues se le atribuyen varios hurtos más y un gran robo de joyas y 100.000 euros en efectivo a una anciana de la Boa Vila.
La mujer, que tenía dos viviendas y alquilaba habitaciones, se vio sorprendida por la actuación del ladrón, que aprovechó para coger las llaves y sustraer el dinero que la víctima iba acumulando en sobres producto de sus rentas.
El acusado decidió alojarse en un hotel de Pontevedra y comenzó a gastarse el dinero en marisquerías, mujeres y drogas, hasta que resultó detenido.
La Policía logró recuperar la mitad del dinero sustraído y algunas joyas.