Cazan a un narco gallego que vivía en Canarias con identidad falsificada

La Guardia Civil le detuvo tras ser denunciado por su vecina, a la que había robado el coche 
Comandancia de la Guardia Civil de Las Palmas de Gran Canaria. GOOGLE
photo_camera Comandancia de la Guardia Civil de Las Palmas de Gran Canaria. GOOGLE

El 29 de septiembre, una mujer de avanzada edad denunciaba en la Guardia Civil que su vecino se había apropiado de su coche, aprovechando que ni ella de su marido, por cuestiones de edad, apenas podían conducirlo. Fue el inicio de la caída de M.R.A., narcotraficante gallego que vivía en el municipio grancanario de Santa Brígida en compañía de un cómplice (que también sería detenido como encubridor) empleando una identidad falsificada.

Los agentes llegaron a él en el marco de las investigaciones por el asunto del coche, detectando tras comprobar sus datos que tenía a sus espaldas una orden de búsqueda y captura dictada por la Audiencia Nacional, que le considera uno de los artífices de una gran introducción de cocaína que tuvo lugar en 2016.

Los investigadores del Instituto Armado comenzaron a sospechar tras comprobar que el ahora detenido, que ya está en prisión por orden judicial a la espera de ser trasladado a Madrid, intentó hacerse con el citado vehículo empleando la documentación de una tercera persona. La artimaña le condujo a la ruina, pues sirvió a los agentes del puesto del Instituto Armado para conocer su identidad y saber que se trataba de un narcotraficante gallego con órdenes de detención.

La Audiencia Nacional le buscaba desde 2016 por su relación con un gran alijo de cocaína

VARIOS INTENTOS. Los funcionarios de la Guardia Civil, que, en base a los datos aportados por la vecina que presentó la denuncia, sabían la dirección del investigado, acudieron en varias ocasiones al domicilio para detenerle, pero en cada una de ellas era encubierto por su compañero de piso, M.A.J.S., de 50 años, que siempre declaraba que M.R.A., de 56, no se encontraba en casa.

Ante esa tesitura, los funcionarios de la Benemérita optaron por dirigirse a las autoridades judiciales para obtener una orden de registro del inmueble, algo que consiguieron a los pocos días. Sin embargo, finalmente no fue preciso hacer uso de ella, pues el narco gallego decidió entregarse de forma voluntaria en el último intento por localizarle que realizaron los funcionarios antes de proceder al registro. Fue el día 4 del presente mes de diciembre.

Tras los hechos y la posterior toma de declaración en la Comandancia de Las Palmas de Gran Canaria, el juzgado de la isla decidió poner en libertad con cargos al presunto encubridor.