La alerta por nuevo temporal ha puesto en alerta a la ciudad. Vecinos y comerciantes de las zonas afectadas por las trombas de agua han tomado medidas para evitar o minimizar el impacto de nuevas inundaciones. Es el caso de Fernando Olmedo, que se anegó el pasado domingo y el miércoles por la crecida del regato Valdecorvos y a pesar de la mejora del drenaje ejecutada este año durante las obras de reforma del tramo final de la calle.
"Tenemos preparada una plancha para tapar la puerta en caso de que se vuelva a inundar", explica Yolanda Ruibal, trabajadora del Restaurante Atlántico, que recuerda que la lámina de agua medía casi medio metro de altura. "Lo que queremos es que se nos dé una solución. Nos entraron aguas fecales en el local. Y todos sabíamos que, pese a la reforma que se hizo, esto iba a volver a pasar", indica.
La última inundación en Fernando Olmedo ocurrió en 2014. Y en el Concello no se garantiza que episodios como el de esta semana vuelvan a ocurrir, ya que se trata de una zona de alto riesgo. Aún así, los técnicos municipales y los de la concesionaria del servicio del agua estudiarán medidas para minimizar este tipo de sucesos.
Los que también han tomado buena nota de los efectos del temporal han sido los responsables del complejo deportivo de Campolongo. La empresa Serviocio Beone, concesionaria de la instalación municipal, instaló este viernes barreras para protegerse de posibles trombas de agua. Los sacos de arena se han colocado en la zona sin urbanizar que hay en el lateral del edificio y justo en la entrada al mismo.
El director del centro, José Bamio, asegura que se han adoptado medidas para que la arqueta que hay frente al complejo no se colapse. Si el alcantarillado no resiste la presión del agua se activará una bomba de achique. "Confiamos en poder prestar servicio con normalidad", subrayó Bamio, que recordó que, en caso de que se produzca alguna incidencia, la empresa mantendrá a los usuarios informados a través de distintos canales.
DEPORTE Y OCIO. La llegada de la borrasca Fabien, que eleva a roja la alerta por vientos de hasta 140 kilómetros por hora en Galicia, afectará a la programación deportiva y de ocio prevista para la jornada de hoy en Pontevedra.
El Concello ha ordenado el cierre preventivo de las instalaciones deportivas al aire libre. La suspensión de las actividades se producirá durante toda la jornada, desde las seis de la mañana hasta medianoche. "Só para as instalacións ó aire libre", recalcó este viernes el concejal de Deportes, Tino Fernández.
Los talleres navideños previstos en la pasarela 12 de Novembro se celebrarán en el Centro Leste. La Festa da Xiada de A Pedreira queda suspendida y la tirolina de la Alameda quedará cerrada debido a los fuertes vientos.
La reparación de la cubierta de Pasarón costará 35.200 euros y la ejecutará la empresa acevi. las obras de emergencia contratadas por el Concello tras el desprendimiento de una parte de la estructura debido al temporal, comenzarán "de xeito inmediato".
"O prioritario é asegurar a zona na que saíron voando as pranchas e retirar ferros ou materiais que ameacen a seguridade da xente. Unha vez rematados estes primeiros traballos, agardamos que coa maior brevidade, poderase abrir de novo ó tránsito a rúa Luís Otero", explicó este viernes el concejal de deportes, Tino Fernández, a través de un comunicado de prensa.
El estadio, abierto en 2020
En paralelo a esta actuación, el Concello solicitará las planchas necesarias para reponer las que se llevó por delante la borrasca. Aunque estas llegarán en aproximadamente un mes, la Concellería de deportes prevé que el estadio de fútbol de Pasarón se abra al público para el primer partido de liga que disputará el Pontevedra Club de Fútbol en 2020.
"Parece improbable que vaiamos ter as pranchas instaladas para esa data.Pero, en todo caso, unha vez asegurada a cuberta, xa non haberá perigo para que o público poida ocupar o resto das gradas do campo", explicó Fernández en referencia a la zona afectada de la instalación, la zona de Preferencia.
