Más personal para aplicar las medidas anti-covid el próximo curso. Es la principal petición de los equipos directivos de los centros educativos de la ciudad frente al protocolo elaborado por la Xunta de Galicia para la vuelta a las aulas en septiembre. "Ahora mismo tenemos turnos de un profesor de guardia en la salida del centro, para que 450 niños se monten en ocho autobuses", explica como ejemplo Juan Carlos Pérez, director del IES A Xunqueira II.
La Consellería de Educación establece agrupaciones de alumnos denominadas 'grupos burbuja', que realizarían todas las actividades juntos sin mezclarse con otros menores del centro para evitar contactos. Esta medida implica realizar la entrada al centro de forma escalonada, salir al recreo por turnos y organizar multitud de desdobles y dispositivos que permitan mantener a los alumnos alejados. "Todo eso con los mismos profesores las mismas horas es inviable", indica David Alvariño, director del IES Frei Martín Sarmiento, que asegura que el centro no cuenta con el espacio necesario para garantizar las distancias estipuladas en las aulas ni en el patio. "Tampoco puedes dejar a los alumnos en la misma aula durante el recreo y hay que contar también con la necesidad de contacto de los adolescentes", cuanta Alvariño.
Del mismo modo, el director del IES A Xunqueira II, señala que lo ideal para centros con mucha concentración de alumnado como el suyo es contar con profesorado de apoyo. "Nosotros necesitamos entre uno y dos profesores más", cuenta, aunque reconoce que la incorporación de nuevos profesores para afrontar la situación de pandemia supone una movilización de recursos muy importante. "Se trata de una cuestión de prioridades, puede que ahora sea más importante reforzar la sanidad de cara a un posible rebrote", cuenta Pérez, que asegura que el protocolo es correcto en lo que se refiere a los criterios técnicos, aunque sea difícil de llevar a cabo.
Una de las críticas que recibe el modelo de los 'grupos burbuja' es que no tiene sentido mantener al alumnado separado entre sí en comunidades de hasta 25 estudiantes si luego comparten autobús.
"En la reunión que tengamos los directores con la Xunta transmitiremos las dudas y peticiones que nos lleguen de los centros que se pongan en contacto con nosotros", indicaba sábado Juan Carlos Pérez, que señalaba las mayores dificultades de los colegios e institutos de las ciudades, más masificados, frente a centros del entorno rural, con más facilidades para aplicar las medidas de distanciamiento. En el mismo sentido, Pérez explica que la situación es diferente en los institutos y en los colegios. "En la Educación Secundaria se produce una reconfiguración del centro cada 50 minutos, con cambios de clase y grupos, lo que hace mucho más difícil aplicar todas estas medidas", cuenta.
Por su parte, la directora del CEIP A Xunqueira I, Susana Diéguez, asegura que la sensación que tienen los centros educativos es que están "solos ante el peligro" y pone el acento también en la necesidad de ampliar el cuadro de personal para aplicar esas medidas.
A mediados de julio, Diéguez indica que los equipos directivos tienen el tiempo justo para llevar a cabo un ingente trabajo de organización del centro que recae por completo sobre sus hombros. "Tanto la jefa de estudios como yo hemos estado colocando adhesivos en el suelo de las aulas para marcar las distancias", avanza la directora sobre las tareas en su centro. Del mismo modo, lamenta que toda la responsabilidad recae sobre el centro, desde la compra de geles hidroalcohólicos o la organización de los grupos. "Y eso solo en 15 días que nos quedan para organizarlo todo", cuenta.
La posibilidad de nuevos períodos de confinamiento obliga al profesorado a buscar alternativas para poder continuar el curso aunque los estudiantes no puedan acudir al centro.
En el CEIP A Xunqueira I, su directora asegura que el hecho de formar parte del programa Edixgal en los cursos de 5º y 6º de Primaria ya facilitó el trabajo en el confinamiento de la pasada primavera. "Ahora estaría bien contar con unas semanas de clase para explicar a los niños que empiecen 5º el funcionamiento del sistema, para que aprendan a acceder a los contenidos y a procesar textos, luego no habría problema", cuenta Susana Diéguez.
