"Es un colegio pequeño, que está creciendo y las familias de los niños de tres años les da mucha confianza que haya aulas de 14 o 15 alumnos", explica la directora del CEIP A Carballeira de Lourizán, María Gómez. Este es su primer curso en el cargo, que asumió de buen grado para volver, con una comisión de servicios, al centro en el que dio clase pocos años antes. Algo tendrá.
Con una matrícula de 100 alumnos (103 a partir del jueves, gracias a nuevas incorporaciones), puede presumir de ofrecer "una enseñanza personalizada" y un "trato cercano, familiar", subraya. "No es lo mismo una clase de 15 niños que de 25, como ocurre en muchos centros del casco urbano". Actualmente cuentan con una unidad por cada curso de Primaria y dos en Infantil (una de tres años y otra mixta, con los de cuatro y cinco).
Plan Madruga, comedor, Abalar, E-Dixgal o robótica educativa son algunas de las posibilidades que ofrece el centro para atraer alumnado. Y lo hace. No solo de la parroquia, sino también del casco urbano. Hay al menos tres familias que llevan a sus hijos cada día a Lourizán desde A Parda, Monte Porreiro o Fernández Ladreda.
Gómez Barba destaca, además, la gran implicación de las familias en el funcionamiento del centro. "Somos como una piña. Hay muy buena relación y se nota". De hecho, la ANPA está tan involucrada que incluso participó en el desfile infantil del Entroido de Marín con el grupo de alumnos disfrazados de robots con la idea de promocionar el colegio y la escuela pública, en un entorno en el que hay hasta tres concertados religiosos. Asimismo, la directora apunta que no solo están en campaña en estas fechas (el martes, por ejemplo, hubo jornada de puertas abiertas) en la que las familias deben solicitar plaza para sus hijos, sino que durante todo el año difunden sus actividades.
A Carballeira triplicó las peticiones de plaza el año pasado respecto a cursos anteriores. También destacó el auge de otros colegios periféricos como Parada-Campañó (donde el ANPA también hace una gran labor), Ponte Sampaio o Cabanas-Salcedo, que pasó de 17 solicitudes a 30 para este curso; o el CEIP San Martiño de Salcedo, que subió de 13 a 23.
El período de solicitud de plaza se abrirá este jueves, también a través de Internet
Las familias que quieran escolarizar a sus hijos nacidos en 2015 para el próximo curso ya pueden hacerlo. Desde este jueves al 20 de marzo estará abierto el período de solicitud de plaza, para ellos y también para el alumnado de Infantil, Primaria, ESO y Bachillerato que desee cambiar de centro, siempre que haya vacantes.
El calendario del procedimiento de admisión y matrícula puede consultarse en el DOG del 15 de marzo de 2013. Además de presentar la solicitud en el colegio elegido, las familias también pueden utilizar la herramienta informática implementada el curso pasado para gestionar el proceso de admisión. "Deste xeito, garántese o dereito da cidadanía ao acceso electrónico aos servizos públicos, mantendo tamén a posibilidade de presentar esta solicitude de forma presencial", subraya.
La aplicación admisionalumnado (https://www.edu.xunta.es/admisionalumnado) posibilita que las familias cubran la solicitud en la aplicación, marquen los criterios del baremo que, llegado el caso, quieran que se les valoren, y puedan presentarla de forma presencial en el centro o por vía electrónica a través de la propia aplicación.
Por otra parte, tal como quedó establecido en sorteo público, en caso de empate de puntos para una misma plaza, las letras de prioridad establecidas fueron Z-T para el primer apellido y C-J para el segundo.
El ser tan pocos (hay aulas de Primaria con nueve alumnos) hace que todos se conozcan y estén pendientes, lo que ayuda a evitar casos de acoso, por ejemplo, que "de seguida se detectarían". Aparte de los servicios que ofrece, como comedor ("grazas ao Concello e á Fanpa"), Plan Madruga, transporte escolar o E-Dixgal, destaca la implicación del profesorado para "meterse en proxectos novos, aínda que lle supoña máis traballo" y también la accesibilidad para hablar con los docentes en cualquier momento.
El único "tirón de orellas" lo reserva para las escasas horas de Orientación y de Audición e Linguaxe, por lo que apremia a la Consellería a mejorar la situación.
