La Comunidade de Montes de San Vicente de Cerponzóns ha cumplido una vieja aspiración: adquirir la Casa do Pobo, propiedad del Arzobispado de Santiago de Compostela, que los vecinos vienen utilizando de forma gratuita desde hace años como local social y centro dinamizador de la parroquia.
La entidad que preside Juan Romero y la autoridad eclesiástica han cerrado las negociaciones con un acuerdo mediante el cual la Iglesia recibirá 140.000 euros por el inmueble y por terrenos anexos que abarcan una superficie de 6.000 metros cuadrados. Aún no se ha concretado si la operación se cerrará a través de un único desembolso o mediante pazos aplazados.
Aunque durante las conversaciones también se había puesto sobre la mesa la posibilidad de llegar a un pacto para el alquiler del local social por un período de 50 años, los dos partes entendieron que la venta del edificio es la fórmula que resulta más ventajosa.
En este sentido, Romero destaca la buena disposición que mostró el propio arzobispo de Santiago, Julián Barrio, cuya intervención ha sido decisiva en la concreción de las negociaciones.
La operación es firme, si bien aún no se ha formalizado de forma oficial. Su concreción está a la espera de un trámite ante la Gerencia Territorial del Catastro para la segregación de la Casa do Pobo, que comparte la misma parcela con la iglesia parroquial y la vivienda del párroco.
El acuerdo solo está pendiente de la segregación del inmueble, que está en el mismo terreno que la iglesia y la vivienda del párroco
Los trámites van a un ritmo muy lento. "No podemos formalizar la compra mientras no tengamos el documento conforme se ha disgregado el inmueble", precisa Romero. Además, señala que esta situación les está causando un perjuicio porque sin ese trámite no pueden efectuar las obras de acondicionamiento precisa el local.
Entre las mejoras que la Comunidade de Montes tiene previsto realizar en el inmueble figura la reparación del tejado "que se está cayendo»" para evitar filtraciones y humedades, además de un plan de desinsectación y desratización de las dependencias. Romero subraya que es necesario actuar en este edificio "cuanto antes" por "una cuestión de higiene" ya que las actividades programas durante el año siguen llevándose a cabo en estas instalaciones en unas condiciones deplorables.
El presidente de los comuneros de Cerponzóns destaca que la adquisición de la Casa do Pobo es "muy importante para la parroquia y para otras zonas del entorno porque los vecinos podrán beneficiarse de unas instalaciones de ámbito social". Además, Romero confía en que la rehabilitación del local social lleve aparejada la renovación de un viejo parque infantil.
