Cuatro clientes devuelven 208 kilos de bivalvos tras el cierre del marisqueo por toxinas

La mercancía retornada no llega al 20% de lo subastado en lonja  El Intecmar eleva a definitivo el paro que afecta a los trabajadores a pie
Almejas devueltas a a lonja de Campelo por un cierre por toxina en 2019. RAFA FARIÑA
photo_camera Almejas devueltas a a lonja de Campelo por un cierre por toxina en 2019. RAFA FARIÑA

El cierre por toxinas del marisqueo en el fondo de la ría de Pontevedra se salda con la devolución de 208,42 kilos de bivalvos. La mercancía retornada apenas llega al 18% de los 1.178,67 kilos de moluscos que se vendieron el 28 de junio en la lonja de Campelo, el mismo día en el que declaraba la alerta biológica por lipofílicas, una toxina que puede afectar a la salud humana.

Responsables de la rula de Poio confirmaron este viernes a este periódico que fueron cuatro los clientes que decidieron deshacerse del género que habían adquirido en la subasta. La mayor parte de las devoluciones fueron de almeja babosa, 155,8 kilos en total. De japónica se reintegraron 37,62 kilos y de navaja otros 15. Todos estos bivalvos serán devueltos ahora al mar.

Esta situación afectará económicamente a los trabajadores a flote, que fueron los que en la jornada del miércoles salieron a faenar en sus embarcaciones en la ría, el mismo día en la que el Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño de Galicia (Intecmar) detectaba un episodio de toxinas, el primero que afecta al sector en lo que va de año.

El organismo dependiente de la Consellería do Mar elevó este viernes a definitivo el paro extractivo para el marisqueo a pie, que tenía la esperanza de que el cierre cautelar decretado el 6 de julio se anulase. Hasta que se reduzca el nivel de toxicidad, todo el sector (tanto el que trabaja en la playa como desde sus embarcaciones) no podrá recoger bivalvos en el fondo de la ría de Pontevedra.

El paro biológico se produce en el peor momento para estos profesionales: en plena campaña de verano y con buenos precios para la almeja y el berberecho.

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