Los clubes se encargarán de la gestión de los nuevos campos de fútbol que el Concello tiene en barrios y parroquias. El Gobierno local negocia ya las condiciones para ceder sus instalaciones a las entidades deportivas por un período de 30 años con posibilidad de prórrogas.
El concejal de Obras y del Rural, Demetrio Gómez Junquera, avanzó en rueda de prensa que las conversaciones se han iniciado con dos sociedades deportivas: Monte Porreiro y Cerponzóns. Y aunque todavía no se ha llegado a un acuerdo, debido a algunas discrepancias, el edil nacionalista confía en que el asunto pueda llegar a buen puerto.
La cesión de los campos de fútbol afectará a aquellos de titularidad municipal, por lo que se excluyen aquellos que son de otros colectivos, como comunidades de montes. Aunque, en la práctica, el de Monte Porreiro ya lo gestionaba el club de fútbol, la intención del Concello es que esta situación se plasme por escrito. Lo mismo ocurrirá con las futuras instalaciones de hierba sintética, caso de la de Chan do Monte (Cerponzóns), Campañó, Salcedo, Gatomorto (Santa María de Xeve) y Ponte Sampaio.
Las sociedades deportivas que asuman la gestión de estos centros tendrán el deber de conservación, limpieza y mantenimiento; abrir y cerrar las instalaciones; garantizar su buen uso y que otros clubes puedan usar los campos. A cambio, el Concello les dará prioridad a la hora de fijar los horarios de entrenamiento y de los partidos del fin de semana.
Gómez Junquera aseguró que el papel de los clubes será el de una especie de bedel, dejando al Gobierno local la responsabilidad de las grandes obras, la inspección de las instalaciones y el pago de las inversiones necesarias para que los campos estén en perfecto estado. Pontevedra también se reserva el derecho a reservar (con preaviso) ciertas horas para clubes de otros barrios o parroquias y para aquellos campeonatos que requieran el uso de estas instalaciones. Los gastos corrientes y las tarifas correrán a cargo del erario público.
