Las Cofradías de Pescadores de Pontevedra, a través de su Federación Provincial, han remitido una carta al Ministerio de Sanidad, con copia a la Consellería do Mar, con el fin de que incluya al marisqueo y a los recursos específicos como "actividades prohibidas a causa de los efectos de la Covid-192.
Las cofradías explican que, tras la declaración del estado de alarma el pasado 14 de marzo, el Gobierno central "limitó la libertad de circulación de las personas quedando, con carácter general, la población confinada en su vivienda habitual", con la suspensión de la apertura al público de establecimientos comerciales y numerosas actividades económicas, entre ellas las de hostelería y restauración. "No se contempla, en cambio, la suspensión de la actividad del marisqueo y recursos específicos. No obstante, esta actividad extractiva se está viendo especialmente afectada por la grave situación actual, debido a la práctica imposibilidad de poder desarrollarse de forma segura por los profesionales de sendos subsectores, tanto por razones de seguridad sanitaria, como por razones socioeconómicas", detalla el comunicado.
En este sentido, las cofradías han criticado que la labor extractiva en el marisqueo y en los recursos específicos se desempeña de forma colectiva en los distintos bancos de las zonas marisqueras, en las que "los trabajadores y trabajadoras trabajan a escasa distancia unos de otros, lo que dificulta la adopción de las medidas adecuadas para evitar o minimizar un posible contagio por Covid-19". Esto, aseguran desde las cofradías, supone "un grave riesgo para la salud de las personas".
CAÍDA EN PICADO DE LAS VENTAS. Por otra parte, señalan el cierre de los establecimientos de hostelería y restauración, que son los principales destinatarios de las especies marisqueras y de recursos específicos como la causante de la "caída en picado" de las ventas de estos productos que, actualmente, califican como "prácticamente nulas" en lo que se refiere a consumo doméstico.
Esta situación ha provocado "una paralización del sector", que las cofradías piden que sea tenida en cuenta por la Administración pública, con el fin de "evitar la situación de desamparo en la que se están encontrando las personas que se dedican a las labores de marisqueo y recursos específicos, en su gran mayoría mujeres".
Las cofradías no descartan que la situación se vea agravada durante las próximas semanas. Por ello, han solicitado al Ministro de Sanidad que "acuerde la suspensión de la actividad de marisqueo y recursos específicos, por resultar necesario tanto para proteger la salud de las personas que desempeñan dicha actividad, como para proteger y garantizar la subsistencia de este sector especialmente vulnerable".
