Las diversas asociaciones de comercio ambulante de Galicia mantuvieron este jueves una reunión en Pontevedra con el objetivo de consensuar una postura común en sus reclamaciones a las diversas Administraciones públicas. Tal y como aseguran en su comunicado, "cremos que para seguir traballando necesitamos a comprensión e a axuda das distintas Administracións xa que ata agora a única axuda real que tivemos foi o cesamento de actividade".
Reivindican que su actividad ha demostrado ser "rendible e sostible" y que contribuye notablemente "ao desenvolvemento económico dos pobos". Por ello, proponen una serie de medidas tanto a los ayuntamientos como a la Xunta e incluso al Gobierno central.
A este último le piden que decreten el cese de actividad si no es posible reactivarla, que la Seguridad Social reconozca como enfermedades profesionales algunas de las dolencias que sufren a consecuencia de su trabajo y que se les reconozca un coeficiente reductor para la edad de jubilación.
Es a la Xunta de Galicia a la que realizan un mayor número de propuestas que van desde la creación de un protocolo sanitario específico para el sector hasta la condonación de las tasas portuarias mientras dure el covid. Solicitan además la elaboración de una ordenanza reguladora marco y de un manual de buenas prácticas.
Instan también a los ayuntamientos a que se incluya a los vendedores ambulantes dentro de las campañas publicitarias de impulso al comercio local y que muestren mayor compromiso: "Desde a Consellería permítenlles ampliar a superficie dedicada ao mercadiño e con todo deciden non autorizalo". En relación a esto, piden a las diputaciones provinciales que colaboren de manera directa con los ayuntamientos para la "organización e mantemento das medidas tanto humanas como económicas incluídas no protocolo".
