El Concello no recurrirá la sentencia que da validez al contrato de A Canicouva

Gulías confía en que este proceso sirva para que el Tribunal de Cuentas ratifique la legalidad del alquiler de los terrenos para la futura planta de compostaje
Comparecencia de este lunes de Anabel Gulías. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera Comparecencia de este lunes de Anabel Gulías. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

El Concello no recurrirá la sentencia que da validez al contrato de alquiler de los terrenos de A Canicouva en los que se prevé construir la futura planta de compostaje. La portavoz municipal, Anabel Gulías, confirmó este lunes que los servicios jurídicos aconsejan asumir el fallo que obliga a la Administración local a retomar el pago del arrendamiento de la parcela cedida por la Comunidade de Montes de la parroquia.

Los comuneros habían recurrido a los tribunales por el impago de una de las facturas, la del año 2021. Los servicios municipales eran contrarios al abono de los 20.000 euros adeudados por la denuncia presentada por el PP ante la Fiscalía, en la que aludía presuntas irregularidades en el contrato. Finalmente, el Ministerio Público archivó la causa al no apreciar ningún indicio de delito.

El asunto no finalizó en el Juzgado de Primera Instancia, sino que el fiscal trasladó el asunto al Tribunal de Cuentas por si existiese alguna anomalía.

El organismo regulador aún no ha resuelto el expediente, aunque desde el Concello se considera que la citada sentencia despeja las posibles dudas. "A sentenza ten unha importancia decisiva. Nós estabamos seguros de que o contrato era legal. Eu confío en que o Tribunal de Contas non aprecie ningún indicio", dijo este lunes Gulías al ser preguntada por la prensa.

La edil del BNG criticó la actitud mantenida por el PP durante todo este proceso, al igual que hizo hace unas semanas su compañero Raimundo González Carballo, concejal de Facenda. Aseguró que el principal partido de la oposición tiene "unha teima e unha obsesión" con el proyecto de A Canicouva y contra la gestión del Concello.

En paralelo a esta cuestión, el Gobierno local tramita el nuevo contrato de basuras, el de mayor cuantía de los servicios públicos municipales. En él se incluye la construcción de la polémica planta de compostaje.

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