El Concello urge el traslado del cereal almacenado en las antiguas naves de Pontesa para evitar nuevos riesgos. Entre ellos, la hipotética reactivación del incendio que el pasado día 6 arrasó el antiguo complejo fabril, propiedad de la empresa hispanobrasileña Itaipu S.L. y en la que operaba Galigrain, la filial del Grupo Nogar que guardaba allí 42.000 toneladas de grano, sobre todo cebada y pipas de girasol.
La concejala de Protección Cidadá, Eva Villaverde, explicó este lunes que las instalaciones "seguen igual que hai unha semana". Los Bombeiros acuden una media de dos veces al día al recinto para refrescar el material orgánico. El fuego está controlado y no hay llamas, pero la autocombustión del grano mantiene el nivel de alerta.
"De aí que se vexa fume", explica la edil, que recuerda que los servicios de emergencia realizan sus tareas desde las alturas, a través de la escalera del camión de extinción de incendios, al no poder acceder al interior de la antigua factoría por la presencia de amianto, un mineral tóxico. "Se a empresa non quita todo ese grao, a situación vai seguir sendo igual", lamenta Villaverde, que teme que la alerta en la zona continúe "eternamente". "Hai que mobilizar o grao", recalcó.
Inspección
La concejala del BNG también confirmó que los servicios municipales están colaborando en la investigación de la tragedia de Pontesa. Los informes redactados por distintos departamentos,que evitó detallar, han sido trasladados a la Policía Judicial. Será un juzgado el que dirima ahora las responsabilidades penales de la tragedia, que se cobró una vida, la de Benito González, el operario de Marín que falleció como consecuencia de las graves quemaduras sufridas durante el incendio.
En cuanto a las administrativas, serán las administraciones competentes, como la Xunta y el Estado, las que determinen si ha habido alguna infracción.
En paralelo al seguimiento del caso Pontesa, el Concello confirmó este lunes que la inspección llevada a cabo el pasado viernes en las naves que el Grupo Nogar tienen en Campañó confirma que dichas instalaciones sí reúnen las medidas de seguridad de las que carecía el complejo de Ponte Sampaio. En ambos recintos se realiza la misma actividad, el almacenamiento de cereal.
"Nunha primeira inspección ocular, determinouse que si había medidas de seguridade, como acceso a auga a través dun oxival", indicó Villaverde, que recordó que los técnicos municipales cruzarán ahora la documentación solicitada a la empresa para verificar que si reúne todos los requisitos legales exigidos.
