La Subdelegación del Gobierno en Pontevedra acogió esta mañana una mesa redonda centrada en la nueva reforma laboral y la situación de desigualdad de las mujeres en el campo laboral, organizada al amparo del 8 M, Día Internacional de la Mujer. En el evento, dirigido a personal de los servicios sociales, de los CIM, abogados, procuradores, graduados sociales, sindicatos y #cualquier otra persona interesada, participaron, además de la subdelegada del Gobierno, Maica Larriba, Jaime Cabeza Pereiro, catedrático de Derecho de la Universidad de Vigo; Sandra Cid Conde, graduada social en Relaciones Laborales y Técnica en Igualdad; y Ana Pouso Lijó, jefa de la Unidad Especializada de Seguridad Social de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Pontevedra.
A lo largo de toda la mañana se debatió y se arrojó luz sobre cuestiones trascendentales del ámbito sociolaboral femenino como las desigualdades laborales, las diferencias retributivas, la precariedad, la inserción laboral de las mujeres e incluso el acoso en los lugares de trabajo o las mujeres en los ERTES. En su intervención, Maica Larriba puso en valor la nueva reforma laboral aprobada por el Gobierno destacando que “beneficia a las personas trabajadoras y, en especial, a las mujeres porque uno de sus objetivos es reducir la temporalidad que sufren principalmente las trabajadoras”. En esta línea, subrayó que los efectos positivos de la reforma ya se empiezan a percibir, pues como indica el último Informe mensual del Comprado de Trabajo de Pontevedra, en el mes de febrero de 2022 las mujeres firmaron un 42% más de contratos indefinidos que durante el mes anterior.
Maica Larriba también informó de que en el conjunto de la provincia el 45,5% de los nuevos contratos realizados en febrero fueron suscritos por mujeres, cifra que representa un 3% más del que lo hacían el año anterior. Por otra parte, la subdelegada del gobierno quiso destacar que “durante el mes pasado, casi el 70% de los contratos que exigían formación universitaria fueron firmados por mujeres”.
Así, Maica Larriba incidió en que la reforma laboral actual “revierte algunos de los aspectos más lesivos de la reforma del Partido Popular que en su momento supuso un importante retroceso en derechos laborales, especialmente para las mujeres que sufrieron de manera muy profunda los efectos de la crisis económica”. “Con esta reforma”, explicó, “se recupera la ultraactividad y el convenio de empresa deja de tener prioridad en materia salarial, de modo que las mujeres, que sufren salarios más bajos y desarrollan su actividad en sectores más precarizados, si se verán beneficiadas”.
Con todo, la subdelegada del Gobierno recordó que “a pesar de los avances, las diferencias de género se siguen manifestando en materia laboral, con sectores muy segregados, diferencias en el reparto de responsabilidades familiares, hendiduras en el apartado retributivo o en el menor acceso de las mujeres a puestos de responsabilidad. “Asimismo”, añadió, “las mujeres siguen concentrando las tres cuartas partes del empleo a tiempo parcial y su inactividad es unos 10 puntos superior a la de los hombres”.
Maica Larriba insistió en que la igualdad efectiva entre hombres y mujeres “es un elemento fundamental para la construcción de una sociedad más justa” y hizo un llamamiento “a seguir trabajando desde las instituciones públicas para prestar apoyo decidido al proceso de participación plena de la mujer en el ámbito social, económico y laboral”. En esta línea destacó el “compromiso firme del Gobierno en la adopción de políticas públicas dirigidas a frenar las diferencias de género en el comprado laboral y en el campo económico”.
