En los nueve primeros meses del año, 12.866 contratos temporales de la provincia se han convertido en indefinidos, lo que supone un aumento del 36,2% con respecto al mismo periodo de 2018. Así se desprende de un informe realizado por Randstad, para el que ha analizado los datos publicados por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) de enero a octubre de 2009 a 2018. Si se echa la vista atrás, a principios de la crisis, el aumento con respecto a 2009 es similar, del 38,6%, por lo que los datos empezaron a mejorar este año.
Así, Pontevedra es la provincia gallega con los mejores datos, y se sitúa por encima del total de la comunidad autónoma, muy por encima de A Coruña (27,5%), Lugo (27,3%) y Ourense (23%). Sin embargo, la estadística no es tan buena en cuanto al peso de contratos convertidos sobre el total de indefinidos. Ourense (45,4%) es la provincia en la que mayor peso tiene este tipo de contratos respecto del total de contrataciones indefinidas, seguida de Lugo y Pontevedra (44%) y de A Coruña (42,8%), que ocupa la última posición.
En cuanto a la comunidad autónoma, Randstad destaca que el número de contratos temporales convertidos a indefinidos en Galicia ha aumentado un 29,9% respecto al mismo periodo del año anterior, convirtiéndose en el mayor incremento registrado en el último decenio. En concreto, las conversiones en la región han superado la barrera de las 36.700, registrando la cifra más elevada entre 2009 y 2018.
El aumento con respecto a 2009 es muy similar, del 38,6%, por lo que los datos empezaron a mejorar a lo largo de este año
Además, Galicia es la cuarta comunidad autónoma con un mayor peso de conversiones sobre el total de contratos indefinidos, con el 43,9% del total, lo que la sitúa muy por encima del total nacional (36,5%) y solo por debajo de Andalucía, Extremadura y Navarra. En total, los contratos temporales convertidos a indefinidos fueron 36.740 en toda la comunidad autónoma.
"La tasa de contratos indefinidos que provienen de uno temporal ha alcanzado la cifra más elevada de los últimos seis años, ya que actualmente dos de cada cinco contratos indefinidos provienen de uno temporal. Este índice demuestra que el trabajo temporal se posiciona cada día más como un puente hacia el empleo estable. Los contratos de duración determinada incrementan la empleabilidad de los profesionales, les ayudan a incrementar su experiencia y les permiten compatibilizar el empleo con la formación", señala Luis Pérez, director de Relaciones Institucionales de Randstad.
En cuanto a sectores profesionales, en el ámbito nacional más de la mitad de los contratos indefinidos realizados en industria son conversiones (52%), seguida de la construcción (43,6%), los servicios (34,8%) y la agricultura (20%).
