Los vecinos de la zona de Leborei, en la parroquia pontevedresa de San Vicente de Cerponzóns, están cansados de poner de manifiesto un problema cada vez más recurrente: el atasco de camiones por el vial que recorre el lugar de norte a sur, conectando la N-550 con el enlace que desemboca en la carretera de Pontevedra a Vilagarcía.
Sin ir más lejos, en las últimas cuatro semanas se han producido otros tantos incidentes con vehículos de gran tonelaje que, posiblemente guiados por los dispositivos GPS, se adentran en un vial con un ancho que no les permite seguir adelante.
La reclamación vecinal apunta a la búsqueda de una solución, bien vía señalización, bien mediante otra alternativa, del lugar, para evitar la presencia de los camiones en una carretera que, además, sirve de paso para los peregrinos que recorren el Camiño Portugués, que también se ven afectados por los incidentes.
