Zabala de la Serna: "Defender los toros en Pontevedra supone defender la libertad"

Voz y escritura de referencia en el orbe taurino desde las páginas de El Mundo. Sus crónicas son el diapasón de la Fiesta en los últimos años y una jugosa mezcla de información y literatura. De ellas brota la pasión por el mundo de los toros y el interés por enganchar al lector, al que pone siempre en el centro del ruedo, junto al protagonismo del toro

Vicente Zabala de la Serna. JAVI MARTÍNEZ (EL MUNDO)
photo_camera Vicente Zabala de la Serna. JAVI MARTÍNEZ (EL MUNDO)

Sus crónicas taurinas son el resumen de toda una época. Una época convulsa en el universo del toro donde el arte de la tauromaquia intenta resistir la ferocidad de un mundo en el que cada vez más se limitan nuestras libertades. Con la temporada ya avanzada, Vicente Zabala de la Serna analiza lo que ha sucedido en ella, con Pontevedra y sus dos espectaculares días de toros como objeto de un análisis comprometido con la Fiesta y con un oficio, el de contar las cosas de la manera más atractiva posible.

Venimos de dos años en el desierto ¿Cómo está viendo Vicente Zabala de la Serna la temporada de la normalidad?

No ha sido ni está siendo fácil recuperar esa normalidad después de dos años muy complicados, no solo para el toreo, sino para todos los sectores culturales. La temporada empezó con muy buenas expectativas con las primeras ferias de la temporada y con Sevilla y Madrid con muy buena respuesta y ahora parece que ha bajado ligeramente en julio, quizás por la situación económica que se empieza a ver. A excepción de San Fermín que ha sido la gran noticia del mes de julio y que ha sido espectacular

Este momento de catarsis, que hemos vivido todos, y en concreto el mundo de los Toros no considera usted que sería bueno que la Fiesta lo tomase como un punto de partida para un tiempo nuevo de una mayor relación con la sociedad
Creo que el tiempo de pandemia, durísimo, y en el que hemos estado muy centrados en la supervivencia, ha sido un tiempo perdido en cuanto al trabajo interior del sector taurino. Estaban pendientes una serie de reformas para no volver al sitio del que veníamos, con algunos puntos que no estaban funcionando, pero no se ha cambiado nada en cuanto al modelo de negocio. No se ha hecho una reflexión interna. En cuanto a la relación con la sociedad sí que veo una mayor conciencia en los grandes protagonistas de la fiesta, (aparte del toro, el principal) como son las figuras del toreo que durante la pandemia se han implicado y han hecho un ejercicio de responsabilidad tremendo que no se ha valorado en su justa medida, pues noto que están más abiertas al contacto con la sociedad, a dejarse ver y tener esa presencia que le ha faltado antes. Una presencia social en la que se echa mucho en falta la visibilidad mediática, en los grandes canales de información, especialmente la televisión, la radio o la prensa.

"El tiempo de la pandemia, durísimo, ha sido un tiempo perdido en cuanto al trabajo interior del sector taurino"

En cuanto a la temporada y lo puramente taurino ¿qué es lo que más le ha llamado la atención?
Creo que hay dos nombres que me tienen rendido a lo largo de la temporada, que son El Juli y Morante De La Puebla, Morante De La Puebla y El Juli. Ha habido dos ferias donde han marcado una diferencia abismal, marcando el paso, como son la Feria de Abril y en San Isidro, y en las otras ferias su respuesta está siendo tremenda. Y los subrayo porque son dos toreros, Morante con 25 años de alternativa cumplidos y El Juli a punto de hacerlo. Otro nombre para el pódium sería Roca Rey, con un nivel gigantesco, de haber vuelto a ser el de antes del parón al que se le juntaron lesión y pandemia, estando mucho tiempo en el dique seco. Es alguien que tira mucha de la taquilla y arrastra mucha gente joven. Tampoco me quiero olvidar a la gran revelación, la gran esperanza blanca del toreo, que es Tomás Rufo. Desde que ha tomado la alternativa en septiembre, en tan poco tiempo, allí por donde pisa como matador de toros deja una honda huella. Hablamos de una inminente figura del toreo.

Los cuatro que ha destacado estarán el fin de semana en Pontevedra ¿Cómo valora los carteles de La Peregrina?
Pues creo que no se puede rematar mejor un fin de semana taurino que lo que se ha hecho con esos dos carteles que pienso deben contar con un respaldo masivo en los tendidos. Te he dado cuatro nombres destacados de la temporada y ahí están los cuatro. Una Feria inmejorable. Y junto a ellos Manzanares con una trayectoria indiscutible. También alguien que tiene un papel muy importante en el regreso del toreo al pueblo y a los pueblos. Muchas veces nos olvidamos de él por cuestiones estilísticas, pero es un referente en mantener con vida la fiesta de los toros, como es El Fandi, un auténtico ídolo que desde nuestra mentalidad urbanita de las ferias de relumbrón no llegamos a ver, pero que ha mantenido vivo un tejido taurino que es vital para el toreo y ofrece siempre un espectáculo que es para todos los públicos. Muchas veces buscamos una tauromaquia muy refinada, pero nos olvidamos que esto es también una fiesta, y él encarna ese espíritu mejor que nadie.

"Hay dos nombres que me tienen rendido a lo largo de la temporada: El Juli y Morante De La Puebla"

Podemos definir la Plaza de Pontevedra como una plaza de resistencia al quedarse como el último bastión taurino de Galicia ¿qué valor tiene esa permanencia dentro del contexto taurino?
Pontevedra es la perla de Galicia, como lo ha sido siempre, y el ejercicio de supervivencia de una propiedad privada como es la de los Lozano creo que es admirable y debería contar con todo el respaldo de la afición de España y del Norte, y de entidades que deberían velar con mayor ahínco en defensa de la fiesta, como es la Fundación Toro de Lidia. Ante estos últimos bastiones que nos quedan en determinadas regiones, como Pontevedra o Gijón, tenemos que hacer un ejercicio de responsabilidad y compromiso, porque estamos hablando de una cuestión de supervivencia, y no creo que sea algo exclusivamente taurino. Estamos hablando de la defensa de la libertad, de un modo de vida, de no dejarnos arrastrar por todo este globalismo, este mundo ‘woke’ que nos quiere imponer una moral casi dictatorial, que te dice lo que tienes que comer, cómo tienes que invertir tu dinero en cultura. Es un momento muy complicado que va más allá de los propios toros y que implica un ejercicio de resistencia, de defensa de la libertad. De eso hablamos en Pontevedra. Defender los toros en Pontevedra supone defender la libertad, y es el momento de defender ese mundo rural tan acorralado, el de la caza, el de esa España vaciada que está sufriendo una serie de políticas que la ponen siempre en el foco, pero no hacen más que dañarla y vaciarla aún más.

En 2018 usted publicó una generosa selección de sus crónicas taurinas en el libro Crónicas volcánicas. Leyendo de nuevo algunas de ellas son ese tipo de textos que, aún estando anclados en un momento concreto, semejan atemporales. Entiendo que eso se lo concede la buena escritura y el tono literario. ¿Cuál es la medida justa entre lo que sucede en la plaza y cómo eso el cronista se lo ofrece al lector?
Siempre pienso en lo que decía Michi Panero: "en la vida se puede ser de todo menos un coñazo". Pues escribiendo de toros creo que sucede lo mismo. Hay que tratar de llevar la crónica taurina a ese público que no es estrictamente taurino pero que, de repente, te encuentras con la vecina del cuarto y te dice: «A mí no me gustan los toros pero me encanta leerte». Ese es un objetivo que siempre he tratado de conseguir, y en cuanto a su elaboración, la esencia de una crónica taurina es ver el toro. Si no ves el toro no puedes trasladar nada de lo que sucede ni valorar lo que hacen los toreros con él, porque no te habrás enterado de nada. Los códigos para descifrar la bravura de los toros me sigue pareciendo lo más difícil del mundo. Junto a eso siempre me he preocupado mucho por cuidar el estilo de la prosa, pero unos días sale mejor y otros peor. Pero la lectura tiene que ser agradable.

"Pontevedra es la perla de Galicia; debería contar con todo el respaldo de la afición y de entidades que velen por su defensa"

¿Leyendo sus crónicas o sus perfiles se pone en evidencia el firme vínculo entre lo taurino y lo cultural. De hecho la tauromaquia forma parte del Ministerio de Cultura. ¿Considera que desde ese Ministerio se hace todo lo que se debería por potenciar ese elemento innegable de nuestra cultura?
Pues no se hace nada. Este Gobierno lo único que hace es acorralar la tauromaquia. Podemos ir a las partidas dedicadas cada año en los Presupuestos, ridículas, 65.000 euros entre el Premio Nacional y 30.000 la subvención para la Fundación Toro de Lidia. Eso es una broma. Y lo hemos visto durante la pandemia, todo lo que se ha podido hacer para hacer daño se ha hecho. Pocos cables se nos han echado, desde algunas comunidades sí, pero desde el Ministerio de Cultura no puede ser más nefasta esa gestión. Hasta en el bono cultural no se han incluido los festejos taurinos. Es el gran arte olvidado y además creo que se está haciendo un daño tremendo con ese afán de identificar la tauromaquia con una ideología que es la derecha de una manera absolutamente errónea. Los toros no tienen ideología, vincularlos con determinados partidos es un error. Una plaza de toros es lo más plural que hay, nadie te pide un carnet por entrar en la plaza y todo se debe a ese afán de la izquierda por arrinconarla, traicionando el pasado taurino que los partidos políticos de la izquierda tenían en España. De repente los partidos de derechas se encuentran defendiendo algo que se han encontrado, no es una cuestión de apropiarse de ella, sino que la izquierda ha hecho una dejación de funciones.

"Los toros no tienen ideología; vincularlos con determinados partidos es un tremendo error. Una plaza es de los más plural"

El domingo José Tomás llenaba en solitario la Plaza de Alicante. ¿Qué opinión le merece la figura de José Tomás actualmente? ¿No considera que en este momento de incertidumbres y acosos quizás su papel debería ser más relevante para respaldar la Fiesta, cuándo sí lo hizo en otros momentos?
Mi opinión histórica de José Tomás es el de una figura inalcanzable. En cuanto al planteamiento actual de un torero que he defendido hasta debajo de las piedras es el de una estrategia que no comparto. La fórmula de los cuatro toros no me gusta, y sin abonos para tirar de una feria. Cada uno es muy libre de actuar como quiera, pero para mí es una decepción de alguien que admiro y respeto. Esta hoja de ruta, desde unos planteamientos puramente económicos, está lejos del papel que debería tener un torero de su categoría.

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