El Gobierno en funciones de la Deputación de Pontevedra aprobó este viernes una subvención al Concello de Pontevedra para ejecutar la obra de mejora de la movilidad peatonal en la carretera EP 0002 Marco-Tomeza-Figueirido. Según explicó el todavía vicepresidente en funciones y concejal pontevedrés, César Mosquera, el expediente ya está listo para poder firmar el convenio entre ambas administraciones y sacar a licitación la obra. Se actuará en un trayecto de 2,5 kilómetros de longitud, en el que se construirá una senda en paralelo a esta carretera, por la que además transcurre el Camiño de Santiago.
El nacionalista precisó que no se puede ejecutar una actuación más ambiciosa, con aceras a ambos lados, por falta de espacio, ya que hay muchas casas (algunas incluso centenarias) construidas en los dos márgenes de este vial. No obstante, intervenir en ella es muy necesario, teniendo en cuenta que por esta carretera transitan a diario multitud de peregrinos, además de los propios vecinos que residen en la zona, y acumula un importante volumen de tráfico. Por ello se ha optado por crear una senda peatonal que la haga más segura y, en las dos zonas en las que el ancho de la vía no permite el ancho mínimo de la senda, se construirá una plataforma única de coexistencia. También se crearán pasos de peatones elevados en algunos puntos para facilitar la unión de las viviendas con esta senda, además de lograr un calmado del tráfico, por lo que será una actuación integral.
El presupuesto de la actuación ascenderá a 1,74 millones de euros, de los cuales la Deputación financiará el 80% y el Concello se hará cargo del 20% restante, poniendo a disposición los terrenos necesarios. En los casos en los que pueda hacerlo vía cesión voluntaria de los propietarios, lo hará así, y si no, asumirá las expropiaciones correspondientes. Del importe total, 19.835 euros serán para el pago de esas cesiones y expropiaciones. La tramitación de licencias y autorizaciones de otros organismos también correrá a cargo del Ayuntamiento.
Mosquera señaló que el convenio se podrá firmar ya, si bien la licitación quedará para el nuevo mandato, ya en manos de un gobierno provincial del PP. No obstante, apuntó que "non debería haber problemas", dado que todos los grupos políticos de la Corporación se habían mostrado de acuerdo con impulsar esta obra.
Precisó que, por los cambios que conllevará el traspaso de poderes tras las elecciones del 28 de mayo, puede producirse una demora de dos o tres meses en los procedimientos, pero aún así, el vicepresidente en funciones estima que a principios del próximo año deberían poder iniciarse los trabajos de construcción.
"A Administración non se pode parar. Hai que seguir funcionando", afirmó el nacionalista. Precisamente, preguntado sobre la petición que realizó esta semana el PP exigiéndole al Gobierno en funciones de la Deputación que paralice toda toma de decisiones y reclamando, expresamente, que se desconvoque la reunión del jurado que debe valorar los anteproyectos de Santa Clara. Mosquera respondió que tal petición es una "inmadurez" por parte de los populares. "Prefiro pensar que é inmadurez ou tamén pode ser aquelo de pensa o ladrón que todos son da súa condición, porque no último mandato de Louzán de presidente, nesta época fixeron as que non hai, pero tranquilos, que nós non imos facer ningunha desas", les dijo a los miembros del PP provincial.
