El vicepresidente de la Deputación de Pontevedra, César Mosquera, junto con el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, y el presidente de la Federación Rural Galega (Fruga), Xurxo Álvarez, han firmado este jueves un convenio de colaboración para el seguimiento de los 8.000 composteros individuales que se repartirán en el municipio capitalino al amparo del Plan Revitaliza.
César Mosquera ha destacado que "es la primera vez que en una ciudad se van a desplegar composteros individuales", con sus aireadores y termómetros, que el Ayuntamiento ya tiene contratados para distribuir en las 15 parroquias del rural pontevedrés hasta mayo del año 2020.
El reparto comenzará por las de Salcedo, Tomeza y Campañó, donde ya se han realizado experiencias piloto y "existe demanda e interés por parte de los vecinos". La recepción de los composteros será voluntaria.
El alcalde Fernández Lores ha subrayado que en la totalidad del rural pontevedrés se va a implantar este modelo de tratamiento de los biorresiduos, lo que supone que "el 100% del orgánico de las parroquias se pueda recoger, tratar y fabricar compost".
Eso conllevará, ha dicho, que "Pontevedra, como ciudad, va a ser una de las pocas, sino la única, que está en condiciones de cumplir las directivas de la Unión Europea para 2023", en las que se obliga a reciclar, tratar y recuperar el 50% de los residuos sólidos urbanos. "Intentaremos que sea más", ha añadido.
El convenio firmado este jueves está dotado de 400.000 euros y tiene una duración de dos años. Durante este período, el personal de Fruga, entidad ganadora del concurso público convocado por la Diputación, dará charlas y hará un seguimiento individual de cada compostero, explicando el funcionamiento y corrigiendo posibles disfunciones.