Desalojan a una familia que 'okupaba' una casa en San Mauro

La Policía supervisó el lanzamiento en presencia de los propietarios ? Los dueños instalaron una alarma en el mismo momento
Un agente policial, junto a la casa, el martes. GONZALO GARCÍA
photo_camera Un agente policial, junto a la casa, el martes. GONZALO GARCÍA
Los vecinos de San Mauro, que llevaban varios meses inquietos ante la presencia de una familia de okupas que se había metido en una de las casas del barrio, respiran más tranquilos desde el martes. Así lo relataron a este periódico después de que, por orden judicial, los inquilinos de la vivienda fuesen desalojados en una maniobra pacífica que, eso sí, se desarrolló en presencia de agentes de la Comisaría de la Policía Nacional de Pontevedra.

Los okupas se habían instalado en la casa, ubicada justo enfrente de uno de los laterales del cementerio municipal de San Mauro, después de forzar una puerta metálica que daba acceso al inmueble. Lo hicieron en julio de 2020. Llevaban un año haciendo uso de la casa, que contaba con luz y agua corriente.

El lanzamiento se produjo sin incidentes, dado que los okupas habían sido advertidos días antes de que si no abandonaban la vivienda, serían obligados a ello. De hecho, ya habían comenzado a retirar enseres (se desconoce si propios o de los dueños de la casa) en los días precedentes al desalojo definitivo.

Los dueños de la casa, por su parte, tomaron dos decisiones de forma inmediata: la instalación de un sistema de alarma y de un doble cierre con una cadena y un candado en la puerta que en su día fue forzada por estas personas.

Los desalojados son una familia compuesta de una pareja y tres hijos, según los vecinos, que no opusieron resistencia alguna para abandonar el lugar.