El descenso de la natalidad obliga a los colegios a reinventarse para captar alumnado

Del 1 al 20 de marzo estará abierto el período para que las familias realicen la reserva de plaza para los niños que iniciarán su escolarización en 4º de Infantil

Primer día de curso en el IES Xunqueira II
photo_camera Alumnos del IES Xunqueira II. ADP

El progresivo descenso de la natalidad se refleja directamente en la matrícula de los centros educativos y obliga a sus responsables a reiventarse para tratar de captar alumnado y evitar la supresión de aulas. Ese es el objetivo, aunque, de paso, tratan de ofrecer una ratio que no tiene por qué ser la máxima (25 escolares por aula en Infantil y Primaria), pero que sí aleje el fantasma del recorte de profesorado y medios materiales.

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La prueba de fuego será el mes de marzo. Del 1 al 20 estará abierto el período para que las familias realicen la reserva de plaza para los niños que iniciarán su escolarización en 4º de Infantil (tres años) en el curso 2019-2020. Por eso estas semanas son trascendentales para convencerlas.

Los colegios luchan contra la estadística. Desde el curso 2013-2014, en el que 824 alumnos iniciaron Infantil en Pontevedra, la cifra ha bajado progresivamente hasta los 750 del actual año académico. El INE registra 639 nacimientos en el municipio en 2016 y la oferta de plazas para cuarto de Infantil ronda el millar. Aunque se matriculen en centros de la ciudad niños de otros municipios no se cubrirán en su totalidad.

El reciente cambio de la zonificación escolar contribuyó, en gran medida, a aliviar los colegios más saturados y a incrementar la matrícula en los menos solicitados. El curso pasado fue necesario baremar en los CEIP Álvarez Limeses, Vilaverde, Froebel y Cabanas, así como en la EEI Crespo Rivas y en el concertado Sagrado Corazón de Placeres. Otros no llenaron la clase, pero aumentaron considerablemente su matrícula, como en el caso del CEIP A Carballeira o Parada-Campañó, que junto al Froebel desdoblaron aulas. La otra cara de la moneda se vivió en colegios como el CEIP Príncipe Felipe y A Xunqueira II, que perdieron una línea en Infantil.

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