Dos centros educativos de Pontevedra, el CEIP San Martiño de Salcedo, y el IES A Xunqueira II, recibieron sendos accésit en las Xornadas de exhibición dos mellores proxectos de Polos Creativos después de su primer curso de implantación, celebradas el pasado viernes en en las que la Consellería de Educación entregó los galardones a 21 colegios e institutos que destacaron por sus propuestas. Asimismo, también se llevaron un premio el IES Monte Carrasco (Cangas), el CEE Vilagarcía de Arousa y el CEIP Pérez Viondi (A Estrada).
"Temos que garantir que [los alumnos] saian da escola preparados para os retos da sociedade do século XXI", dijo el conselleiro, Román Rodríguez. A este objetivo responde la dotación de Polos Creativos, configurados como espacios de innovación educativa donde el alumnado puede llevar a la práctica los conocimientos teóricos adquiridos a través de la resolución de problemas reales. "Todo isto permite que cheguen á clase ilusionados e saian coa sensación de que o aprendido ten utilidade".
De hecho, así lo pudo comprobar en la visita a los expositores donde los centros galardonados exhibían sus propuestas, realizadas la raíz de un reto lanzado por la Consellería que consistía en elaborar iniciativas a partir del material de desecho que se les envió con el material de los Polos Creativos (cajas, palés, plásticos...). Se lanzaron seis retos buscando el mejor en cada uno: material científico-matemático, material didáctico-demostrativo, proyecto artístico, solución de accesibilidad y convivencia, recurso de comunicación cultural/social y proyecto de fomento de hábitos de vida saludable. En total, se presentaron 75 propuestas, de las cuáles fueron seleccionadas las 21 mejores: seis de centros de Primaria y otros seis de Secundaria que se alzaron con los primeros premios, ocho accésit y una mención de honor.
El IES Monte Carrasco (1º de ESO) ganó por el diseño y construcción de una maqueta del puente de Rande empleando cartón reciclado; el CEE de Vilagarcía (FP básica adaptada) por la creación de una empresa de reprografía y el CEIP Pérez Viondi por la maqueta de una ciudad inclusiva.
Accésit por un gravímetro casero
El CEIP San Martiño se hizo con el accésit de Primaria en el reto de mejor material científico-técnico con un gravímetro casero para medir cuánto tiempo tardan los objetos en caer y determinar la aceleración de los mismos. La directora del centro y coordinadora del proyecto, Patricia Sampaio, explicó que los artífices fueron los 23 alumnos de 5º y 6º de Primaria que forman parte del Club de Ciencia. Una delegación de cinco de los mayores -por ser su último año en el centro- acudió al evento a Santiago. "Estivemos estudando as forzas que inflúen no voo dos avións e de aí xurdiu a idea". Para no tener que elaborar el gravímetro de cada vez, idearon una base para colocarlo y transportarlo con el propio cartón en el que venía embalado todo el material de los Polos Creativos.
El soporte se completa con cinta conductora, papel de periódico y de plata, cola blanca, cinta carrocera, pinceles y un cutter. Todo este proceso lo relatan al dedillo en un vídeo de cuatro minutos que puede verse en Youtube. El circuito se conecta a un ordenador con la programación de scratch que ofrece los resultados.
Sampaio valora muy positivamente este primer curso, "realmente un prólogo", de Polos Creativos. "Os profesores estámonos formando para ofrecer recursos e imos empregando outros materiais como lápices 3D, robots ou un plotter de corte".
Fomentando hábitos de vida saludable y sostenibilidad
El reciclaje de ropa, creando nuevos productos upcycling fue el proyecto con el que el IES A Xunqueira II se llevó el accésit del reto de fomento de hábitos de vida saludable y sostenibilidad. Así lo explica Lisa Franco, profesora de Geografía e Historia que participó en la iniciativa.

Experta en costura, propuso al alumnado (diez jóvenes de entre 1º de ESO y 2º de Bachillerato) aprender a reutilizar telas en buen estado de prendas que no iban a volver a usar para elaborar otros diseños como bolsas totebag o estuches. "Eles compran moita moda de baixo custe e despois visten todos iguais", apunta la docente. Por eso, aprendieron a darles una nueva vida a camisetas, sudaderas, vaqueros o blusas y también a coser cremalleras o botones. "Fixemos especial fincapé nas telas vaqueiras, porque teñen un custe enerxético alto" y las prendas "quedan novas" aunque se aburran de ellas o les queden pequeñas. Trabajaron fuera del horario escolar, dos horas cada 15 días. "Co accésit sentíronse súper motivados, porque viron que valoraban as súas creacións, moi orixinais". De hecho, en la jornada en Santiago incluso recibieron ofertas de compra. "Pero alí só estaban en exposición".