"Una grandísima idea". Eso le parece a Rafa Domínguez el anteproyecto para destapar el tramo urbano del Gafos. El portavoz del PP aseguró, a preguntas de los periodistas, que la iniciativa es del agrado de su formación. "No le veo mayor problema", dijo Domínguez, que considera que esta obra es "algo que Pontevedra quiere".
El plan está ahora en una fase inicial. Después de la redacción de los estudios previos, que determinan la "viabilidad", de liberar al Gafos de las canalizaciones instaladas en 1970 durante la urbanización de Campolongo, el siguiente paso será la convocatoria de un concurso de ideas con carácter internacional.
El objetivo es que de este proceso resulte el proyecto definitivo para acabar con el soterramiento del cauce fluvial a su paso por el citado barrio. La previsión de la Concellería de Medio Natural e Desenvolvemento Sostible, que dirige Iván Puentes, es que este diseño esté listo en la primera mitad del año que viene.
A partir de ahí, el Concello decidirá en qué se usan los 600.000 euros que hay consignados para iniciar las obras, que se harán por fases debido al elevado coste de las mismas.
APOYOS. La intención de Pontevedra es que esta actuación cuente con el apoyo de otras administraciones. Por este motivo se sondearán posibles colaboraciones, convenios o acceso a subvenciones para hacer realidad este plan, que colectivos como Vaipolorío reclaman desde hace años.
Los estudios técnicos previos dibujan la creación de un parque lineal en el río, con zonas de estancia y de ocio y con un paso a distintas cotas en el que los ciudadanos puedan bajar a una parte del Gafos que ahora está cubierta de hormigón.
La intervención en este entorno proyecta reformas de mayor y menor calado en una superficie total de 80.800 metros cuadrados, lo que, según cálculos de la Concellería de Medio Natural equivaldría al tamaño de doce campos de fútbol como el de Pasarón.
