La Axencia de Doazón de Órganos e Sangue (Ados) recibió en 2022 un total de 106.339 donaciones de sangre, una cifra ligeramente superior a la de 2021 pero todavía por debajo de la de 2019, el último antes de la pandemia, en el que se alcanzaron 109.330. Sin embargo, la provincia de Pontevedra sí mejora ya aquellos registros precovid tras experimentar un crecimiento del 5,37% en las aportaciones, hasta llegar a las 39.430. Son casi medio millar más que entonces. Con todo, es Vigo quien parece tirar del dato, ya que mientras en esta ciudad crecieron las donaciones, en la de Pontevedra, con un total de 4.020, bajaron respecto de 2021.
La tasa relativa de donaciones se situó en Galicia en las 40 por cada 1.000 habitantes, "dentro dos índices recomendados" por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Estas 106.339 aportaciones recogidas a lo largo del año pasado supusieron un pequeño avance del 0,04% con respecto al 2021, según detalló ayer la directora de Ados, Marisa López, sobre un balance anual que expuso acompañada del director xeral de Asistencia Sanitaria del Sergas, Jorge Aboal. En su intervención, reveló que proceden de 77.132 donantes, que son en torno a un millar más que el curso previo. Además, hubo 9.624 que se animaban por primera vez, un número bastante superior a los 6.887 del ejercicio anterior.
Hasta el 46,5% de las donaciones —un total de 49.509— se produjeron en las urbes, que cuentan la ventaja de tener locales permanentes a los que acudir, mientras que, para el resto de la comunidad, las unidades móviles de Ados se desplazan, de lunes a sábado, a más de 50 concellos. En consonancia, la tasa media en esta Galicia urbana es diez puntos superior: de 50 donaciones por cada mil vecinos. Y, de nuevo, el reparto es dispar, con Compostela y sus 102 contribuciones a la cabeza de forma destacada, ya que dobla incluso la ratio de su inmediata seguidora, Ferrol, y triplica la de Lugo, que cierra la tabla con 33 donaciones por millar. En Pontevedra es de 49. En términos En cuanto a la Galicia rural, la directora de Ados se detuvo en los que calificó como "concellos estrela", que son aquellos que tienen las mayores ratios en cada provincia: Padrón, con 93 donaciones por cada 1.000 habitantes; Pontecesures, con 70; A Pobra de Trives, con 67, y Meira, con 54.
Por provincias, la mayor tasa fue la de A Coruña, con 44 por cada 1.000 habitantes pese a registrar 49.129 donaciones en todo 2022, menos que el año inmediatamente anterior. En cambio, la de Pontevedra alcanzó las 42 e incrementó en 2.000 las aportaciones anuales, hasta las 39.430. Ourense y Lugo registraron cifras menores, con 9.659 —es decir, 32 por 1.000 habitantes— y 8.121 donaciones —25 por cada millar—.
Por tipología
De todas estas donaciones, 99.948 fueron de carácter ordinario, mientras que 6.391 fueron por aféresis, es decir, con separación de cada uno de los componentes de la sangre, utilizados luego para ayudar a pacientes de cáncer, leucemia o trasplantes de órganos o de médula ósea.
Del total de donaciones, 99.948 fueron de carácter ordinario, mientras que 6.391 fueron por aféresis
Y en lo que respecta al programa de plasmaféresis desplegado a nivel europeo, que está dirigido a la producción de fármacos a partir del plasma sanguíneo para mejorar la autosuficiencia de los países, se realizaron un total de 620 que permitieron obtener 341 litros de este líquido vital en tratamientos de enfermedades neurológicas, inmunológicas y autoinmunes; para trasplantes, cirugías y grandes quemados; para dolencias hepáticas, para pacientes con problemas de coagulación y para soporte hemoterápico de los enfermos oncohematológicos.
Tres millones en treinta años
La directora de Ados aprovechó esta comparecencia para dar "tres millones de gracias" a todos los que hicieron posible alcanzar las tres millones de donaciones en 30 años. Por su parte, el director xeral de Asistencia Sanitaria subrayó, en base a las cifras obtenidas, la "solidaridad de los gallegos" para entregar "un bien que solo se puede obtener de la generosidad de las personas que quieran donarla".
Marisa López puso el foco en que el 54% de los donantes tenía entre 43 y 65 años, mientras que en torno al 10% están entre los 18 y los 22. De ahí su llamamiento a la "incorporación" de los jóvenes.
Además, destacando la "buena salud y forma física" de los jubilados gallegos, la Xunta aboga por recoger en las recomendaciones acordadas a nivel estatal sobre la posible prolongación de la edad de donación de los 65 años. Y es que ahora solo es posible "con un certificado de buena salud" y si no se es primerizo. De hecho, no se recomienda estrenarse en la donación si se han superado los 60.
Por grupos sanguíneos, el 38,6% de las aportaciones son del A+, que es el más habitual en Galicia, seguida de 0+ con el 36,3%. Precisamente, esta 0+ es la tipología más necesaria en estos momentos, avisó López, quien apeló a la solidaridad en esta Semana Santa indicando que "siempre es una época complicada" porque caen las donaciones pero la demanda —que por lo general exige recibir entre 400 y 500 donaciones diarias— incluso aumenta.