Eduardo Barros: "Si los empresarios no apuestan por las cámaras, desaparecerán"

Aunque se considera una incorporación reciente del comité ejecutivo, Barros presionará para que la Cámara sea un ente rentable

Eduardo Barros. OLGA FERNÁNDEZ
photo_camera Eduardo Barros. OLGA FERNÁNDEZ

La cámara de comercio de Pontevedra, Vigo y Vilagarcía ha iniciado el procedimiento para celebrar sus primeras elecciones tras la fusión.

¿Qué balance realiza de la unión de las tres cámaras?
Creo que el balance se tiene que hacer a partir de ahora, tras la constitución del Pleno y del nuevo comité ejecutivo. Este tiempo que ha pasado ha sido de transición, porque estábamos en funciones. Espero que ahora por fin podamos hablar de una cámara y cerrar las cicatrices que generó el proceso.

¿La fusión ha ‘cuajado’ o ha habido discrepancias?
Para responder a esto es necesario recordar la historia reciente de las cámaras y, particularmente, la nueva ley que anuló el aporte financiero que recibían y que provocó que muchas desaparecieran o sufrieran una grave crisis. Esto nos obliga a afrontar un rediseño de las cámaras para que sean rentables y para poder mantener el personal, que es el mayor activo. ¿Qué sucede? Que creo que nos va a costar. En mi caso, me considero un directivo reciente de la Cámara, porque llevo desde 2010 en el Pleno. Yo ya entré con esta mentalidad, pero ahora espero que todos los empresarios tengan esto en mente. Tenemos que abogar por la viabilidad financiera de las cámaras para poder prestar la función pública que tienen que ofrecer a las empresas y empresarios.

Teniendo en cuenta que las cuotas son voluntarias, ¿cómo se puede lograr que las cámaras sean rentables?
Cobrando por la prestación de servicios, reduciendo sedes y personal... Creo que hay que cambiar el sistema de dirección de las cámaras y que haya un retorno en cualquier acción. Por obligación legal, tienen que generar ingresos, porque si no, no se sostienen. Espero que el nuevo comité ejecutivo parta con esto muy claro. Si los empresarios somos conscientes de que las cámaras son buenos instrumentos para el desarrollo empresarial y somos capaces de crear herramientas que favorezcan el comercio, la industria y la navegación, entonces serán rentables y podrán subsistir. Si los empresarios no apuestan por las cámaras, desaparecerán como cualquier otro entre semipúblico. Yo soy el primero en decir que, si no son eficientes, cerrémoslas.

"No vamos a hacer aquí una Citröen, pero tampoco podemos dejar que se vayan las industrias que generan empleo"

Existe un amplio abanico de asociaciones empresariales, espacios de coworking... ¿Qué prestaciones ofrece ahora mismo la Cámara que le diferencien de la ‘competencia’?
Las cámaras no son comparables a las asociaciones empresariales, porque son entes semipúblicos, con unas competencias otorgadas por el Estado. Dicho esto, las cámaras son unas grandes embajadoras en todo el mundo y una herramienta perfecta para favorecer la internacionalización de las empresas. Además, ofrecen medios para la formación, la búsqueda de fondos europeos, la digitalización, la tramitación de subvenciones y otros servicios para los que otros organismos no están capacitados.

¿A cuánto puede ascender una cuota voluntaria de la Cámara?
La adscripción a la Cámara es automática, de forma que ahora mismo tenemos unas 80.000 inscripciones entre empresas y empresarios del área de Pontevedra, Vigo y Vilagarcía. La aportación voluntaria depende del tamaño y facturación de la empresa. Parte desde los 75 euros al año y da acceso a descuentos en los servicios que implican un coste. En todo caso, voy a proponer que en esta nueva etapa se haga una labor comercial, porque tenemos que generar ingresos para mantener la capacidad de hacer cosas. 

¿Qué porcentaje de esas 80.000 empresas están aportando una cuota voluntaria?
Muy pocas.

¿Son aportaciones suficientes para mantener el organigrama de la Cámara?
De momento, la Cámara es solvente, pero insisto, hay que cambiar el rumbo. Si podemos trabajar sin la preocupación de mirar todos los días el saldo del banco, podremos hacer cosas, centrados en los ver daderos objetivos.

Hay quien temía que el empresariado de Pontevedra perdiese competencias y representatividad en la fusión. ¿Qué les responde?
Depende de lo que quieran los empresarios. Mientras yo esté, no van a desaparecer las instalaciones de Pontevedra, pero si hay otro que piensa que puedan ser prescindibles y el Pleno lo admite, desaparecerán, como pueden hacerlo las de Vigo o Vilagarcía. Yo creo que ofrece servicios a los empresarios y creo que hay que dejar de lado los localismos y aunar esfuerzos.  Y puedo decir que hemos convencido a grandes empresarios  y empresas referentes de Pontevedra para que pertenezcan al Pleno de la Cámara.

Acaba de presentar su candidatura al Pleno de la Cámara con la intención de formar un Gobierno continuista, con el actual presidente, García Costas, a la cabeza. ¿Ya hay acuerdo?
No ha sido una cosa que yo haya propuesto, pero no he recibido noticias de lo contrario y creo que estaremos todos los que quieran continuar.

Usted mantendría el cargo de vicepresidente
En principio, sí.

Hay síntomas de recuperación en la gran economía. ¿Qué ocurre a escala local?
​Esto va por barrios. En términos macro, va mejor, pero creo que en Pontevedra se pueden hacer más cosas. De hecho, los representantes empresariales hemos constituido el Foro Empresa porque no hay una estrategia comercial de la comarca. Falta un capitán que busque salidas. No vamos a hacer aquí una Citröen, pero tampoco podemos dejar que se vayan las industrias que generan empleo de calidad ni el comercio. Las cosas no suceden si no las piensas. Hay que buscar métodos para fijar empleo si no queremos que sea una ciudad dormitorio. No podemos ir a México a decir qué bien se vive aquí, sino que también hay que buscar que la gente pueda vivir aquí con salarios dignos.

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