Santa Trega, en A Guarda, es uno de los asentamientos galaico-romanos más conocidos de la provincia y fue precisamente en este en el que la Deputación de Pontevedra inició un ambicioso proyecto para poner en valor los yacimientos que se extienden a lo largo y ancho del territorio pontevedrés. La iniciativa afecta a 18 conjuntos repartidos entre otros tantos concellos y cuenta con el respaldo del Ministerio de Fomento.
En el caso de Santa Trega, las excavaciones terminaron en el mes de marzo y permitieron recuperar 40.000 piezas arqueológicas, que ahora están siendo inventariadas y analizadas por tres profesionales. Entre ellas hay cerámicas, elementos de bronce... e incluso piezas procedentes de la antigua Cartago, lo que evidencia la importancia del comercio a nivel internacional entre los distintos castros. En el conjunto destacan algunos elementos como el que se ha denominado Cabezón de Santa Trega, que ya se puede visitar en el Museo del lugar.
Rafael Rodríguez, arqueólogo de la institución provincial y director del proyecto, explicó ayer que el equipo que trabajó en dicho lugar intervino en una superficie de 2.000 metros cuadrados y localizó 43 estructuras constructivas que albergaban once unidades familiares.
ORÍGENES. Además de este importante dato, el proyecto dio lugar a otro descubrimiento significativo relacionado con la antigüedad del asentamiento. Tal y como señaló Rodríguez, las pruebas de carbono 14 confirman que el poblado estaba habitado desde, al menos, el siglo IV antes de Cristo.
«Hai uns resultados que fixan a datación no século VIII a.C., pero eses hai que collelos con pinzas por diversas causas. Sen embargo, os que sinalan o século cuarto antes de Cristo si son totalmente válidos porque van acompañados de materiais e estruturas. Tamén sabemos que no século I reurbanizouse todo o asentamento, creando una diferenciación entre o mundo privado e o público, non só con vivendas e rúas, senón tamén con edificacións de carácter social ou relacionadas co mundo das crenzas», manifestó.
OTROS ASENTAMIENTOS. Además de Santa Trega, también está a punto de finalizar la excavación iniciada en Castro Alobre (Vilagarcía de Arousa). En este caso, la Xunta de Goberno provincial aprobó ayer una inversión de 151.887 euros para poner en valor dicho yacimiento, que el próximo jueves recibirá la visita de la presidenta de la Deputación y del alcalde vilagarciano.
En Adro Vello , O Grove, se terminó la limpieza y ahora se acometerá un estudio de estabilidad y geometría de alta definición, con escaneado en 3D, que permitirá establecer los criterios de restauración y conservación.
En el caso de Valga, técnicos de la Deputación iniciaron el pasado lunes los trabajos de sondeo en el conocido como Mercado dos Mouros . Estas labores se prolongarán durante un mes y, en total, se realizarán 14 sondeos para definir el origen y la extensión del yacimiento y para confirmar la hipótesis de que se trataba de una instalación de carácter portuario.
Según explicó ayer la presidenta provincial, Carmela Silva, en el mes de julio comenzarán las excavaciones en A Lanzada (Sanxenxo) y está previsto que a mediados de septiembre empiecen las de O Facho de Donón (Cangas).
En palabras de la socialista, «con todas estas actuacións queremos impulsar o patrimonio, que contribúe dunha forma moi importante á dinamización socioeconómica, cultural e turística de Pontevedra. Somos unha provincia que é un referente en castros e debemos aproveitar ese potencial. Un pobo que quere ter futuro ten que asentar ese futuro no pasado e aquí temos un glorioso».
