El Concello de Pontevedra congelará en el próximo ejercicio económico todas las tasas e impuestos municipales, a los que no subirá "nin o IPC", indicó este lunes el portavoz del Gobierno municipal, Raimundo González.
Sin embargo, para poder seguir aumentando la recaudación, el Concello apuesta por centrarse en la línea de las inspecciones. En 2016 abordará las de las tasas de basura y saneamiento, para detectar todas aquellas irregularidades que hacen que los vecinos esquiven el pago de determinados impuestos de los que reciben el servicio.
Así, González explicó que las nuevas viviendas que se construyen en el rural siguen la ley y se dan de alta a efectos urbanísticos para pagar el IBI, pero no lo hacen con impuestos como la basura o el saneamiento, dos servicios básicos ofertados por el Concello.
De hecho, el portavoz municipal explicó que hay un elevado número de inmuebles que, pese a que tienen el servicio del saneamiento, no se conectan. Por este motivo, el Concello procederá a realizar altas de oficio, tal y como se establece en el artículo 11 de la correspondiente ordenanza municipal, lo que permitirá cobrar la tasa de saneamiento a una vivienda aunque no esté conectada y no esté disfrutando de este servicio, pero que lo tiene totalmente disponible.
EQUIDAD FISCAL. "Isto pode facerse porque os veciños teñen o servizo. A efectos recadatorios non é unha cantidade substancial, pero facémolo por un principio de equidade fiscal. Se hai o servizo hai que pagar por el", sentenció González. Esto supondrá que cada vivienda tenga que pagar nueve euros más al bimestre por el saneamiento y otros siete euros más por el coeficiente de vertido que cobra la Xunta de Galicia, lo que supondrá una subida del recibo de la basura de 16 euros al bimestre. Eso alcanza un total de 96 euros al año. A esto sólo cabe añadir "unha salvedade, pois cabe a posibilidade de aplicar ata catro anos de atrasos", indicó González.
Con estas inspecciones se busca también subsanar las posibles irregularidades que existan sobre las actuales viviendas: reformas de casas antiguas que no se dieron de alta, nuevas viviendas que tampoco se han registrado o inmuebles que tienen en su planta baja un negocio y que sólo pagan un recibo. En este caso habría que realizar un alta nueva y pagar los dos recibos correspondientes: el de la vivienda particular y el del negocio que se encuentra en el bajo, que puede suponer más del doble del precio del recibo que se paga por el uso doméstico.
ACTIVIDADES ECONÓMICAS. Por otra parte, el Concello tiene previsto continuar con las inspecciones a empresas por el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE). De este modo se pretende que cada empresa pague lo que le corresponde realizando un actualización de su información.
Raimundo González explicó que muchas empresas se dieron de alta en su momento, pero que no se han preocupado por informar de las ampliaciones, del incremento de la superficie..., por lo que "hay que obrigalas a que regularicen os seus datos". En este sentido, durante este año se subió el padrón en 500.000 euros, gracias a controlar aquellas empresas que facturan más de un millón de euros.
Así, el Concello pretende seguir adelante con su "vontade política de conxelar taxas e impostos, pero potenciando a vía da inspección". Los controles que se realizan también "case a diario" son los de ocupación de la vía publica por parte de mesas y veladores de los establecimientos hosteleros de la ciudad. De este modo se pretende mantener todo el ámbito de tasas e impuestos con su situación perfectamente regulada.
