El Concello de Pontevedra descarta restringir el consumo de agua

Considera suficiente la reserva del embalse de O Pontillón, que lleva un mes cerrado
Estado actual del embalse Pontillón do Castro.
photo_camera Estado actual del embalse Pontillón do Castro.

Aunque parece que el tiempo de sequía se ha instalado en las Rías Baixas y las olas de calor se suceden como si no hubiera mañana, el Concello descarta la adopción de medidas restrictivas en el consumo de agua. Al menos, por el momento, por lo que los pontevedreses podrán seguir abriendo el grifo sin someterse a horarios, regar a conciencia sus jardines (aunque siempre se recomienda un consumo moderado) y surtir de agua fresca sus piscinas.

La única directriz tomada hasta la fecha ha consistido en el cierre de las puertas del embalse de O Pontillón do Castro, una decisión que fue adoptada hace algo más de un mes y que se mantendrá vigente en previsión de que la situación pueda obligar a tirar de esta reserva.

El concejal responsable del Ciclo da Auga, Raimundo González, asegura que la red municipal de suministro de agua, que también abastece a los concellos vecinos de Poio, Sanxenxo y Marín, está funcionando correctamente mediante el habitual sistema de bombeo del agua que porta el río Lérez. Por ello, desecha poner en práctica medidas restrictivas como las que tuvieron lugar en el año 2011, cuando la Administración local solicitó a Augas de Galicia que obligase a Ence a moderar su consumo. «Non estamos usando O Pontillón para poder contar con esta reserva e, de momento, o río está achegando auga suficiente. De ser preciso, estudaríamos que facer, pero non é o caso», explicó el nacionalista.

DEMANDA EXTERNA. La libertad de consumo está garantizada pese a que Pontevedra acaba de registrar el segundo trimestre del año más seco desde 2011 y pese a que los concellos que se surten de la red municipal han aumentado su consumo en un 10% durante los primeros días de julio respecto a 2014.

Como resultado de este último incremento, Pontevedra está enviando a los municipios de Poio, Sanxenxo y Marín algo más de 11.000 metros cúbicos al día y, aunque las estadísticas no entran a valorar los motivos, todo apunta a que la subida se debe a la presencia de más turistas y a la incapacidad de las fuentes propias de estos concellos para hacer frente a la demanda. «Teñen menos caudal do que tirar, polo que deriva nunha maior demanda da auga que surte o Concello», explicó el concejal.

PREALERTA POR SEQUÍA. Otro factor a tener en cuenta es que la Administración Hidráulica de Galicia activó el pasado martes el estado de prealerta por sequía tras detectar un «empeoramento significativo» de varios indicadores que determinan el estado hidrológico de la demarcación Galicia-Costa.

El protocolo establecido para estos casos implica que la Administración intensificará el seguimiento de los niveles de ríos, embalses y acuíferos, así como de la situación meteorológica y las posibles incidencias que se detecten en el suministro de agua a la población.

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