El fuego arrasó un paraje de Caldas de Reis hace dos años, y de la tierra ennegrecida nacieron pinos. Desde ayer, además de las coníferas surgidas espontáneamente, también crecen 130 castaños. En su plantación participaron 70 alumnos del colegio Alfonso VII, el IES Aquis Celenis y el Centro Ocupacional O Saiar.
Esta actividad se realizó en una zona del monte de San Clemente colindante con el de San Andrés, en paralelo a la demarcación de los lindes de los terrenos de ambas comunidades y un cortafuegos. El alcalde de Caldas de Reis, Juan Manuel Rey, subrayó el valor de este gesto, porque recordó que resulta habitual que las lindes entre propiedades sean el origen de controversias.
No fue una acción aislada la que tuvo lugar durante la mañana, sino que se enmarca en una apuesta por la repoblación forestal, protagonizada por estudiantes, que tiene continuidad, se prolonga desde hace trece años y se extiende por todas las parroquias del municipio.
Además de agradecer a los estudiantes su colaboración, al igual que a la Xunta y la empresa que cedió los castaños, el regidor municipal subrayó que la finalidad que persigue esta iniciativa es doble: dar vida al monte y crear una conciencia medioambiental entre los vecinos más jóvenes. Actualmente, el número de árboles plantados a través de esta iniciativa es de 3.500.
Miguel Ángel Ramiro estuvo presente en el acto representando a la Consellería de Medio Rural e do Mar y también acudió el concelleiro de Persoal, Manuel González, así como José Luis González, técnico de Medio Ambiente del Concello y responsable de las tareas de organización y coordinación, y los presidentes de las comunidades de montes de San Clemente y San Andrés, que colaboraron en el evento.
La ayuda de la asociación Asoprovida, la Fundación Pueblo para Pueblo y la agrupación de Protección Civil también hizo posible que fuese posible el acto, enmarcado en la celebración del Día Forestal Mundial, que finalizó, cerca de las 14.00 horas, con un refrigerio en el que participaron todos los protagonistas.
