Varios colectivos ligados al mundo del motor veneraron este domingo a San Cristóbal, expatrón de los arrieros convertido con el paso del tiempo en santo de los conductores y de todos los viajeros. La delegación local de la Asociación de Taxistas de Pontevedra cumplió un año más con la tradición, al igual que transportistas, profesionales del sector y vecinos que acudieron a título particular.
La celebración comenzó pasadas las 11.00 de la mañana con una concentración de vehículos en la iglesia de Mourente, donde acto seguido tuvo lugar una santa misa en honor a San Cristóbal y la posterior bendición a manos de un párroco de todos los vehículos que se acercaron a los alrededores del templo. A mediodía los participantes dieron salida a una procesión motorizada que se dejó sentir por diversas calles de la ciudad a base de golpes de bocinas y toques de claxon.
POIO. En Poio la celebración de San Cristóbal contó con un amplio programa de actividades coordinadas por la Asociación de Transportistas del municipio, en las que participaron camioneros, taxistas, repartidores y todo tipo de trabajadores asociados al sector.
El punto de partida fue una misa celebrada a primera hora de la mañana en el monasterio poiense, donde la coral de Poio fue la encargada de poner la nota más festiva. La celebración también incluyó una comida de confraternización en Combarro y sesión de verbena para poner el broche final a la jornada.
Benditos por San Cristóbal
El gremio de taxistas, profesionales del transporte y aficionados rinden homenaje a su patrón con la tradicional procesión motorizada por Pontevedra y Poio
