El PP propone peatonalizar Benito Corbal e invertir el sentido en Barcelos

Moreira rechaza las plataformas únicas en Castelao y Cruz Gallástegui "porque los niños corren el riesgo de ser atropellados"
La propuesta de tráfico que el Partido Popular presentará hoy a Concello y oposición.
photo_camera La propuesta de tráfico que el Partido Popular presentará hoy a Concello y oposición.

El PP quiere que el Concello escuche sus sugerencias de tráfico para el centro de Pontevedra. Por este motivo, la formación ha diseñado un mapa alternativo que este viernes presentará en la Comisión de Mobilidade para buscar el apoyo del grupo de Gobierno.

Los ‘populares’ comparten la idea del BNG de limitar el paso de vehículos por el centro a residentes y servicios, pero rechazan el sentido de circulación que los nacionalistas proponen para varios viales y la construcción de plataformas únicas en Castelao y Cruz Gallástegui. «Los niños corren el riesgo de ser atropellados», dijo el lunes el portavoz del partido, Jacobo Moreira, sobre esta última solución.

El jefe del principal partido de la oposición plantea que Cobián Roffignac pase a ser una calle de entrada, desde la rotonda de la avenida de Bos Aires, y que se invierta el sentido de la nueva Praza de Barcelos, con sentido único hacia Perfecto Feijoo y Padre Gaite.

SAN ANTONIÑO. El diseño ‘popular’ también contempla que se invierta el sentido de la circulación en San Antoniño, descargando el tráfico hacia Os Tirantes; que el primer tramo de Blanco Porto cambie de dirección, hacia Javier Puig, y que Joaquín Costa mantenga su actual estatus y no el que prevé el Gobierno local, que quiere que se invierta el sentido en toda la calle.

Moreira asegura que el espíritu del mapa viario del PP es que la conducción sea intuitiva, evitando el «zig-zag incomprensible que formula el BNG». El portavoz de los ‘populares’ reconoció, por otra parte, que su alternativa no se apoya en ningún informe técnico, sino «en el sentido común».

El circuito elaborado por la formación de derechas se conoce un mes antes de que el Concello aplique los primeros cambios de su «revolución del tráfico» en el centro.

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