El Café Moderno, uno de los establecimientos más emblemáticos de Pontevedra, reabrirá sus puertas la próxima semana después de casi ocho meses cerrado a cal y canto. Afundación, entidad propietaria del local, confirmó este viernes que el empresario de hostelería Manuel Arís Martínez asume desde ahora la gestión del local, que abrirá sus puertas "con el 95% de probabilidad, el próximo miércoles" 5 de abril, explicó esta misma tarde el hostelero, responsable también de la cercana cafetería Los Castellanos. Aunque la decisión se tomó hace dos meses, aproximadamente, los trámites burocráticos atrasaron la reapertura hasta abril.
"Queremos levantar el Café Moderno, que estaba dejado de mano, y ponerlo en todo su esplendor". En el local, que abrirá de ocho de la mañana a once de la noche, se servirán "buenos desayunos, buenos vinos, buenos pinchos y tapitas, algo tradicional" al estilo del otro local que regenta y a "precios competitivos". Para ello contará con "personal cualificado de Pontevedra, con años de antigüedad en la hostelería", que este mismo viernes se acercaba a su próximo lugar de trabajo.
Solo la apertura de las contraventanas después de tanto tiempo ya generó curiosidad entre los viandantes, más aún en cuanto se abrió la puerta de par en par. En el interior permanece el mobiliario de siempre, prácticamente inalterable, a excepción del de la terraza, acomodado provisionalmente también dentro. Con esta visión se contesta, prácticamente, a la gran pregunta que se formulaba la clientela que llevaba esperando ocho meses su reapertura, desde que el anterior concesionario cerró sus puertas de forma abrupta. La imagen es prácticamente l la misma imagen que mantenía en su retina. Algo, por otra parte, esperado, pues se trata de un establecimiento histórico protegido por Patrimonio. "No podemos hacer obras, está catalogado", admite Arís, y "seguimos las normas que nos dictaron", pero sí se acometieron "mejoras en las barras" y aunque se mantienen las mesas originales sí se renovó parte del mobiliario, eso sí, manteniendo la misma esencia.
Un año prorrogable
Arís Martínez explicó que él estaba ya jubilado con una persona contratada para llevar el día a día de Los Castellanos, pero esta nueva aventura empresarial lo animó a "volver a la vida activa" para asumir personalmente la gestión del Café Moderno. Lo hizo después de "negociar" las condiciones impuestas, en principio por Afundación. "Intenté corregir algunas cosas que no entraban en la hostelería de hoy", referidas a cuestiones vinculadas al horario y al personal. "Pequeñas cosas subsanables y llegamos a un acuerdo".
Así que firmaron un contrato de "alquiler por un año prorrogable mientras ambas partes cumplan" con lo acordado.
Respecto a sus expectativas en esta nueva etapa, afirma que "no soy de esos que me gusta comerme el mundo en un día", pero sí quiere "poco a poco, demostrar a la clientela que puede venir y estar a gusto en el local". Sobre la fecha de inauguración, su idea inicial era celebrarla este mismo sábado, víspera de Ramos, pero resultó imposible porque todavía recibió las llaves este viernes.
De este modo, "mi idea es abrir el miércoles, pero no depende de mí, puede ser complicado en Semana Santa. Creo, al 95% que el miércoles estaré allí". El local está "prácticamente listo" para su reapertura, a falta de la limpieza definitiva, de "meter mercancía y decorar un poquito".
