Ence invertirá en Pontevedra 395 millones de euros si finalmente vence la batalla judicial en curso y logra continuar operativa en Lourizán. La inversión será destinada a reforzar “la eficiencia y sostenibilidad de la fábrica” y será ejecutada de forma progresiva. Los primeros 40 millones en los próximos cinco años y el importe restante en los siguientes ejercicios, siempre y cuando el Tribunal Supremo valide la prórroga en litigio (cuyo plazo expira en 2073).
Así lo anunció esta mañana el director territorial de Ence en Galicia, Antonio Casal, en un encuentro con los medios de comunicación, en el que trasladó que la apuesta por Lourizán “es firme” y que la empresa “agotará todas las vías judiciales en la defensa de la legalidad de la prórroga”. Si es necesario, recurriendo al Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Celulosas sigue manteniendo la previsión de que el alto tribunal se pronuncie “antes de finalizar el año” y, al igual que hizo el consejero delegado del grupo, Ignacio de Colmenares, en la última junta de accionistas, Casal trasladó que hay motivos para ser “ligeramente más optimistas” que hace un año. El Supremo ha admitido a trámite la batería de recursos que presentó la empresa, trabajadores y auxiliares contra la anulación de la moratoria dictada por la Audiencia Nacional. Y, aunque el director territorial incidió en la necesidad de ser “muy prudentes”, interpretó esta admisión como un posible “paso adelante” hacia la permanencia.
Adscripción y traslado
Para la empresa la vía judicial es la principal vía de acceso a la continuidad de la fábrica en Lourizán, aunque también ve “con interés” la opción de adscribir los terrenos al Puerto de Marín”. Una alternativa propuesta por CC OO y arropada por la Xunta de Galicia, que ya ha empezado a ser tramitada por la Autoridad Portuaria (incluya o no la pastera). Casal subrayó que los esfuerzos están centrados ahora mismo en la “defensa de la concesión” y que la efectividad de la adhesión al Puerto “está en manos del Gobierno central”, cuyos portavoces se han posicionado (hasta ahora) en contra de la operación. No obstante, señaló que la compañía sigue “con interés esa posible alternativa” y que agradece la implicación de los promotores de la iniciativa.
Menos perspectivas de futuro suscita la posibilidad de levantar una nueva fábrica en Galicia. Ence ha conocido por este periódico que el Ministerio de Transición Ecológica ha encargado a la empresa pública Tragsa un informe para localizar posibles ubicaciones para una nueva pastera. Pero tal y como trasladó la empresa en su momento, Casal se mostró “convencido que no se va a encontrar ningún lugar” para una nueva Celulosas, ya que las condiciones que requiere son “muy complejas”.
En todo caso, la empresa evita concretar sus planes b hasta que “leamos el contenido de la sentencia”.
Inversión
Casal subrayó que la compañía quiere seguir siendo “líder” en el sector y que para ello ha planificado esa inversión de 395 millones con la que pretende que Ence continúe a “la vanguardia en eficiencia, sostenibilidad y mejores tecnologías disponibles”.
De esta cantidad, cinco millones se destinarán “a seguir avanzando en la reducción de ruido y polvo”, 44 millones a la descarbonización (utilizando biomasa como combustible), 23 millones a la mejora del ciclo del agua (optimizando el consumo de agua y maximizando la calidad del efluente), y 40 millones a reforzar la reducción de las emisiones atmosféricas mediante “proyectos punteros” que captarán el CO2.
Otros 12 millones serán para realizar mejoras en el parque de maderas “para producir más celulosa con menos madera”, 66 serán para optimizar la línea de celulosa y fabricar productos especiales orientados a la bioeconomía, y 205 para recuperar productos químicos en el proceso, una actuación que requeriá la instalación de nuevos evaporadores.
Para llevar a cabo estas actuaciones Ence ha empezado los trámites para ampliar el Proyecto de Sectorial de Incidencia Supramunicipal, que ya ha superado la fase de información pública.
