Ence niega rotundamente incumplir de forma alguna la Autorización Ambiental Integrada (AAI) así como "por suposto, utilizar combustibles nin ningún outro produto incompatible coa devandita Autorización", ha señalado la pastera en un comuniucado como respuesta las acusaciónes de la Asociación Pola Defensa da Ría (APDR) de quemar anualmente desde hace cinco años unas 18.000 toneladas de aceite usado sin tratar. Ence tacha de "mentiras" estas denuncias asegura que "o comportamento ambiental da planta cumpre plenamente con toda a normativa ambiental autonómica".
"As falsas acusacións da Asociación Pola Defensa da Ría (APDR) contra a biofábrica da compañía en Lourizán teñen a evidente intención de xerar alarma social e de danar a reputación dunha planta que, moi ao contrario, cumpre folgadamente con toda a regulación vixente (europea, estatal e autonómica)", asegura en el comunicado.
"De feito, esta planta conta con destacados recoñecementos ambientais internacionais, como a Distinción Oro da Comisión Europea e a ecoetiqueta Nordic Swan, selo ecolóxico oficial dos gobernos escandinavos", añade.
Precisa además que "cumpre de forma escrupulosa con toda a normativa ambiental, incluída –como non podía ser doutro xeito– a orde ministerial APM/205/2018, do 22 de febreiro, que regula o uso como combustible de aceite procesado". En esta línea, la empresa asegura que exige "a todos os seus provedores un certificado que avale que cumpran cos requisitos establecidos" cita.
Insiste Ence que su compañía "leva ao cabo un control rigoroso de todos os seus focos de emisión, que son monitorizados unha vez por segundo por medidores calibrados por unha empresa acreditada, de acordo coa norma UNE –EN 14181". De este modo, invita a visitar la Ademais, para controlar a calidade do aire nos arredores da biofábrica, existe unha cabina de la Xunta de Galicia -cuxos datos están dispoñibles na páxina web da Administración- situada en Campolongo.
Para termina, señala que la de la APDR "súmase outros ataques desta asociación que, no seu afán por prexudicar a esta planta e aos máis de 5.000 postos de traballo vinculados á mesma, non dubida en recorrer ao medo e ao engano.
LA ACUSACIÓN
La APDR de Pontevedra ha asegurado que Ence produce energía eléctrica en su caldera de biomasa quemando anualmente, y desde hace cinco años, unas 18.000 toneladas de aceite usado sin tratar. El colectivo ambiental ha advertido que el uso de esta sustancia está "prohibido" en la Autorización Ambiental Integrada (AAI) que le ha concedido la Xunta.
"Están muy orgullosos de su caldera de biomasa", pero "de energía renovable, nada", aseguraba Antón Masa, el presidente de la asociación. Ence también utiliza aceites usados procedentes de empresas gestoras radicadas en España, Portugal y Mozambique, entre otros países. "Están engañando a la población, actuando de forma ilegal y criminal porque con esta práctica están dañando la salud de las personas", ha insistido. El colectivo ecologista ha advertido que la "contaminación" tanto de las aguas de la ría de Pontevedra como a nivel atmosférico por gases "tóxicos", "afectaría también al sistema respiratorio y al tejido pulmonar de las personas con compuestos que pueden llegar a provocar enfermedades cancerígenas", alerta Masa.
Además, el presidente de la APDR sostiene que esta práctica tendría un "componente económico", porque "ahorra dinero" a la empresa, abaratando el proceso de producción de energía en unos 3,5 millones de euros anuales.
MEDIDAS. La APDR ha anunciado que trasladará su informe al Concello de Pontevedra para que, "si está en sus posibilidades", prohíba la entrada de aceites en la fábrica pastera. También se dirigirá al Parlamento Gallego, estatal y europeo para que investigue "si esto es delito" a nivel ambiental y financiero, sin descartar la posibilidad de acudir a la Fiscalía de Medio Ambiente de Galicia.
Si bien la APDR ha rehusado revelar las "fuentes" por las que ha obtenido los datos que sustancian su informe, Masa ha precisado que "salieron a la luz porque hay empresas que se sienten dañadas económicamente".
