Los dos colegios privados del entorno de Pontevedra, Los Sauces y SEK Atlántico, adelantaron este curso la vuelta a las aulas -tres días antes de la fecha fijada en la escuela pública y concertada- para organizarla de forma escalonada, como una de las medidas incluidas en el protocolo de protección frente a la covid-19. En el primer caso ayer regresó el alumnado de Infantil, Primaria y 1º de ESO, hoy lo hará el restante de Secundaria y el miércoles el de Bachillerato. En el SEK la avanzadilla fue similar.
Fue un retorno con nuevas costumbres, con la mascarilla imprescindible desde los seis años, entradas y salidas de forma escalonada e itinerarios marcados por todo el colegio, medición de temperatura, limpieza de manos de forma frecuente, aulas con separación de 1,5 metros (en Secundaria) o grupos burbuja de convivencia (en Infantil y Primaria), mamparas de metacrilato de separación en los comedores y en algunas aulas y limpieza y desinfección constantes.
Pero, sobre todo ello, la ilusión y el entusiasmo de volver a reencontrarse con compañeros y docentes después de seis meses y las ganas de aprender intactas, tal como destacaron los directores de ambos centros privados.
"Lo más importante es concienciarlos del peligro que supone no respetar las distancias, no usar la mascarilla y no lavarse las manos", apunta Manuel Casal, al frente de Los Sauces.
Con una ratio de unos 20 alumnos por clase, en algunos casos fue necesario llevar a cabo obras de acondicionamiento de espacios para permitir mantener la distancia exigida. "En el comedor habilitamos mamparas y se amplió el horario para que puedan entrar por turnos". En ambos centros el horario es continuo hasta media tarde, por lo que todo el alumnado almuerza en el colegio.
Todas estas medidas contribuyen a que las familias "nos demuestren su confianza en el colegio, ya que necesitamos que los alumnos se incorporen y se relacionen con otros niños".
PRUEBAS AL PERSONAL. "Todo el mundo tenía muchas ganas de volver -coincide Jacobo Olmedo, director del SEK-. Fue una vuelta medianamente tranquila, con la normal incertidumbre".
Además de las obras de acondicionamiento de espacios y de la adquisición de termómetros de infrarrojos (se medirá la temperatura tanto en el transporte escolar como a la entrada a los centros), de gel hidroalcohólico o mamparas, ambos colegios también invirtieron en la contratación de docentes donde fue posible realizar desdobles y también, en algún caso, de personal de cocina y limpieza. "Es una inversión importante, pero no se ha implantado una cuota covid", apunta Casal. Olmedo apostilla que tampoco en el SEK, donde los honorarios de este curso habían sido anunciados el pasado mes de febrero.
Asimismo, todo el personal fue sometido a test serológicos, "para empezar el curso con garantías". No hubo ningún positivo.
