"Espero que algún día pueda comer una pizza"

Tres usuarios del programa Volver a Hablar de la Asociación Contra el Cáncer cuentan su experiencia en el Día de la Disfagia
Charla de profesionales de la AECC. JAVIER CERVERA - MERCADILLO
photo_camera Charla de profesionales de la AECC. JAVIER CERVERA - MERCADILLO

La Asociación Contra el Cáncer de Pontevedra organizó este miércoles una charla formativa en la que se explicó la importancia de la intervención de un equipo multidisciplinar en la recuperación del paciente y el día a día de personas afectadas por tumores de cabeza y cuello y las secuelas de estos en el habla y la deglución.

En el acto, organizado con motivo del Día Mundial de la Disfagia –síntoma consistente en la dificultad en el proceso de deglución–, tres usuarios del programa Volver a hablar ofrecieron sus testimonios en los que destacaron la importancia de los profesionales y la información a la familia para afrontar las secuelas y mejorar su calidad de vida.

Felipe Otero fue operado de cáncer de suelo de boca en 2011 y recibió quimioterapia, y en 2013 fue intervenido por segunda vez ante una recidiva. Él insiste en la importancia de recibir apoyo no solo externo y profesional, sino también de la familia, "gracias a las logopedas que me atendieron (Araceli, Alicia y Ánxela), puedo comunicarme a día de hoy. Sin ellas, hablaría por señas. Y mi mujer, además de apoyarme, me prepara cualquier alimento triturado. Hasta como puré de percebes", comenta. No olvida que todavía tiene dificultades en su día a día, "no soy capaz de que la lengua me ayude a empujar los alimentos. Pero voy a por todas y espero que algún día pueda comerme una pizza".

En 2018 el programa Volver a Hablar atendió a 46 personas 

Miguel Sanmartín tuvo un cáncer en la base de la lengua que le llevó a realizar radioterapia junto a una traqueotomía y una cirugía en la zona afectada. Tras la operación aparecieron las primeras complicaciones. "No podía abrir la boca, no era capaz de hablar y no podía comer", señala. A través de la rehabilitación logopédica consiguió dejar atrás parte de estas dificultades.

Hermosinda González sufrió cuatro tipos de cáncer y tiene que lidiar con dificultades en la movilidad lingual, la apertura de la boca y la pérdida de la voz. Ella misma explica que "empezó tomando 30 yogures diarios para alimentarse y batidos con todos los nutrientes triturados, al igual que las pastillas". Además, por falta de información cada vez que se enfrentaba a la hora de la comida, su entorno no entendía por qué no podía comer o tragar con facilidad. Con paso firme y con mucho optimismo, Hermosinda afirmó que "aunque queda mucho trabajo por delante, la ayuda de la AECC fue vital para aprender a convivir con estas secuelas".

Gracias a un convenio de colaboración con el Concello, la AECC Pontevedra amplió el programa Volver a Hablar a pacientes con cáncer de cabeza y cuello. Durante 2017, 40 personas fueron atendidas, mientras que en el año 2018, asistieron 46 usuarios.

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