¡Estrella!

Imagen de archivo de un camarero pontevedrés sirviendo cerveza. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera Imagen de archivo de un camarero pontevedrés sirviendo cerveza.

8:00

Me despierto, fumo un pitillo, veo un rato las noticias, me doy cuenta de lo temprano que es. Me vuelvo a dormir.

11:30

Calculé mal y dormí demasiado. Cierto que yo, que llevo media vida trabajando desde casa, me pongo mis propios horarios, pero lo de hoy fue una pérdida de tiempo. Veo un mensaje de Pedro Puy, que me anima y me dice que me lee todos los días. Hasta en el PP hay buena gente con criterio. Veo otro mensaje de Ana Pastor, que también tiene criterio y también es buena gente, que se interesa por la salud de mi hermana, contagiada en Londres con el bicho. Pastor sabe lo que es pasar por esta pandemia. Todo mi agradecimiento a uno y a la otra, y que me sigan leyendo, por favor.

14:45

Comemos. Hoy toca plato vegano. Soja texturizada, sí, con espagueti. Entre tres y cuatro días a la semana comemos en plan vegano nuestro hijo y yo. Mi señora lo hace siete días a la semana. Antes fui al súper y compré carne y conservas como para pasar una cuarentena. Mañana haré albóndigas, por si a usted le interesa.

15:35

"Sesta, que fantástica, fantástica esta sesta". Mi versillo del día, adaptación de la obra que cantaba nuestra cantante preferida, Rafaella Carrá. Parezco un lirón. Hasta es probable que lo sea.

17:15

Leo que Estrella Galicia renuncia a hacer un Erte. Buena gente. Hay quien los critica, no sé por qué. De todo hay en la viña del Señor. Muchas grandes empresas abusan, sin ninguna necesidad, de esta herramienta pensada para salvar a los más pequeños y modestos. Los clubes de fútbol de primera división, por ejemplo. Hay que tener la cara de cemento armado para hacernos pagar a todos los sueldos multimillonarios de los futbolistas. Sánchez y su gente tendrían que haber prohibido expresamente que el dinero de todos le abone las nóminas a Messi, Ramos y compañía, cuando eso de los Erte de cuarentena está para evitar la quiebra de otras empresas. Pero claro, imagino que no pensaron que habría gente tan insolidaria. Pues muy bien por Estrella Galicia y muy mal por esos abusones. Es para no abonarse en adelante a ninguno de estos clubes de fútbol que nos toman por tontos perdidos.

17:45

Sigo el discurso del Presidente. Qué guapo es y que bien habla, con ese pelazo que tiene. Es un buen discurso. Duro con los países europeos, casi sin mencionarlos, que se niegan a compartir gastos y sacrificios. En Holanda, que ahora se cambió el nombre y se llama oficialmente Países Bajos, hay especialistas de mucho renombre que se quejan de que ingresemos en los hospitales a los ancianos. Allí los dejan morir, los muy desgraciados. ¿Que el abuelo tiene coronavirus? Bah, que se muera de una vez. Ése es su plan para luchar contra los colapsos hospitalarios y la falta de medios: dejar morir al abuelo, que total ya hizo su trabajo y no sirve para nada. Qué poco respeto por la vida y por una generación que tanto sufrió y luchó para que hoy los dejen morir. Dice también Sánchez que parará toda la actividad no esencial durante toda la Semana Santa. Nueve días, contando los fines de semana, en los que España entera se paralizará. No parece mala idea.

20:00

Estoy conociendo a algunos vecinos. Nos saludamos a diario. Quién nos iba a decir hace un par de semanas que haríamos amigos aplaudiendo en la ventana, pero claro, quién nos iba a decir hace dos semanas tantas y tantas cosas: que el virus que muchos nos tomábamos como una broma, yo el primero, iba a acabar encerrándonos durante al menos un mes; que los héroes iban a ser todos los empleados de la sanidad pública, cajeras y reponedoras de supermercados, empleados de gasolineras, panaderos o estanqueros. O mi señora, por ejemplo, que llega todos los días rendida porque trabaja en una ecotienda de alimentación y que cada vez que la miro con orgullo, me devuelve una mirada de sospecha, tratando de meterse en mi mente, como si quisiera adivinar si yo he creado el coronavirus en un laboratorio para hacerla trabajar con mascarilla. Pues ella, sus compañeras y su compañero tienen todo mi respeto y mi admiración, como tanta gente que hasta el otro día pasaba desapercibida porque no son deportistas o artistas famosos ni multimillonarios que nos hacen pagar sus Erte.

Sólo espero que cuando esto acabe, que acabará, no nos olvidemos de toda esa gente que nos mantiene vivos, a salvo y alimentados. Y los quiosqueros. Hay que hablar de los quiosqueros, que nadie se acuerda de ellos y eso es una tremenda injusticia. Hacen una de las labores más silenciosas y silenciadas estos días, abriendo sus puertas para que recibamos información cada día y sepamos lo que pasa en el mundo y en nuestra ciudad o nuestra comarca, que aunque no lo parezca, siguen pasando cosas, puede que a cámara lenta, pero siguen pasando. También, hay que decirlo, los políticos, los de Madrid, los de Galiza y los de cada pueblo o ciudad. Hay que mandarles también un abrazo, sobre todo a los que gobiernan y siguen asumiendo cada día sus responsabilidades habituales y estas nuevas con las que no contaban. Mucho ánimo a todos y a todas, a Lores, a Carmela Silva y a tanta gente que hace todo lo posible para que este drama sea más llevadero.

Comentarios