El viento sopla a favor de la lonja de la Plaza de Abastos de Pontevedra. La subasta de marisco generó ingresos por valor de 28.083,70 euros en el primer semestre de 2018, lo que supone un 6,1% más que durante el mismo período del año anterior, cuando el negocio se situó en 26.368,70 euros.
La rula, que este año fue trasladada de la primera planta a la zona baja del Mercado, centró sus ventas en siete clases de moluscos y crustáceos. Se comercializaron 3.044,90 kilos de marisco, casi 1.300 más que entre enero y junio de 2017.
Casi el 95% del dinero que movió la lonja fue gracias a la subasta de camarón común y centola, que registraron ingresos de 15.459 y 11.153,70 euros, respectivamente. El resto de la facturación procedió de especies como el lumbrigante (758,50 euros), nécora (322 euros), percebe (293,50 euros), choco (81 euros) y buey (16 euros).
El precio medio por kilo ascendió a 9,22 euros, convirtiendo la lonja pontevedresa en la segunda de la ría con las cotizaciones más altas. La única que superó estos registros fue la rula de Campelo, con ventas medias por kilo de 9,90 euros.
LA REDISTRIBUCIÓN. En paralelo a esta estadística, el Mercado de Abastos culminará estos días el traslado de los puestos de la parte de arriba a la planta baja. La concejala de Promoción Económica, Anabel Gulías, reconoció este martes que esta reubicación está generando críticas por parte de algunos placeros, con los que la edil mantendrá un encuentro el próximo día 16. "Hai protestas porque unha das neveiras dun posto (trasladado) sobresae tres centímetros", aseguró.
La medida para liberar el espacio superior del inmueble municipal ha afectado, según el Concello, a dos puestos de frutas y verduras, que se han colocado en el paseo central de la entrada de la Plaza; un ultramarino y las pementeiras, que se han derivado a las casetas vacías de la zona inferior, situadas en el lateral derecho de la instalación.
Esta reorganización posibilitará la reforma de la primera planta de la Plaza, que cuenta con un presupuesto de licitación de 279.292,78 euros. El proceso de adjudicación no puede cerrarse aún porque el Gobierno central no ha liberado aún los fondos europeos con los que se pagará la actuación. En todo caso, la obra no se realizará este verano, sino a partir de septiembre, tal y como han solicitado al Gobierno local los dos bares que permanecerán en la parte de arriba del inmueble y que compartirán sitio con el gastroespacio previsto por el Concello.
El puesto de agricultura ecológica se ha mudado a la zona inferior hasta que se ejecuten los trabajos previstos en la zona de arriba, en el que habrá 16 nuevos puestos en régimen de alquiler.
