La falta de lluvias ya pasa factura al nivel de los embalses de abastecimiento

Las presas de la provincia están ahora, de media, un 6,3% más bajas que hace un año
El Pontillón do Castro. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera El Pontillón do Castro. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

Aunque el buen tiempo resulte más agradable para pasear y practicar actividades al aire libre, la escasez de precipitaciones en este mes de enero tiene una cara B menos amable y esta se nota ya en los embalses, que presentan un nivel de ocupación más bajo de lo que suele ser habitual en esta época del año.

Según el último boletín hidrológico publicado esta semana por Augas de Galicia, las presas de abastecimiento de la demarcación Galicia-Costa en la provincia de Pontevedra están, en media, un 6,3% más bajas que el año pasado por estas mismas fechas.

Analizando los casos concretos, la que presenta una bajada más drástica es la de Caldas de Reis, donde la ocupación actual es del 40,65%, cuando en enero de 2021 rondaba el 60%.

El Pontillón do Castro, que hace doce meses estaba completamente lleno, ahora está al 93% y, en lo que respecta a los embalses que abastecen a Vigo, el de Zamáns tiene una ocupación del 85,6% (un 7,4% menos que hace un año) y el de Eiras del 79,7% (un 2% menos).

El de Vilagarcía está al 87,9% (es decir, un 3,17% por debajo de enero de 2021); y el de Baiona está al 92,6%, siendo este el que menos variación presenta.

La bajada en los niveles de ocupación es todavía más evidente en los embalses de uso hidroeléctrico o industrial, pues en este caso todos los de la demarcación hidrográfica Galicia-Costa presentan una media del 67%, cuando hace un año estaban al 84%. No obstante, en estos no solo interfiere la falta de lluvias, sino que afecta todavía más la utilización intensiva que realizan las empresas que los explotan para obtener mayor rendimiento ahora que el precio de la electricidad no deja de batir récords históricos.

En todo caso, la escasez de precipitaciones sí es el factor principal en la menor ocupación de las presas de abastecimiento y no hay más que ver los datos registrados por MeteoGalicia para darse cuenta. En su estación de Campolongo, en lo que va de mes solo se han contabilizado siete días de lluvia y muchos de ellos la cantidad fue más bien escasa. Las jornadas que más llovió este enero fueron la del día 4 (con 22,6 litros acumulados por metro cuadrado) y la del 9 (con 23 litros por metro cuadrado), pero las demás la cantidad de agua recogida estuvo muy por debajo de esos niveles. Es más, desde el día 11 prácticamente no hubo precipitaciones en Pontevedra y la previsión para las próximas jornadas no depara ningún cambio a la vista.

De hecho, MeteoGalicia prevé para las Rías Baixas cielos poco nublados o despejados y temperaturas máximas muy altas para lo que suele ser habitual en esta época del año, con valores que globalmente irán en ligero ascenso, pues Galicia terminará enero y empezará febrero bajo la influencia anticiclónica y régimen de viento de componente Este que dejará tiempo seco y sol.

Uno de los inicios de año hidrológico más secos de los últimos 60
El primer tercio del año hidrológico, comprendido entre el 1 de octubre de 2021 y el 31 de enero de 2022, será probablemente "uno de los mas secos" de los últimos sesenta años y estará entre los cinco con menos precipitaciones de este siglo, según la Agencia Estatal de Meteorología. 

Según indicó Rubén del Campo, portavoz de la Aemet, el Centro Europeo de Predicción a largo plazo (organización que cuenta con uno de los modelos de pronóstico meteorológico más potentes) ha anticipado que el volumen de precipitaciones en febrero será "inferior a lo normal" en gran parte de España, sobre todo en el Norte y el Noroeste peninsular, lo que se suma a un enero también muy seco. 

Según añadió Del Campo, "el primer tercio de este año hidrológico se situará probablemente entre los más secos desde el comienzo de la serie, en 1961, y como uno de los cinco más secos en lo que va de siglo", pues en este período solo se recogerán en el país "dos terceras partes" de la precipitación habitual de otros años.

Comentarios