Los feriantes quieren quedarse en Campolongo

El sector recoge firmas para que el Concello traslade de forma definitiva la feria de Rafael Areses, en orillamar, al centro de la ciudad

Uno de los puestos de la feria celebrada por segundo fin de semana consecutivo en el barrio de Campolongo debido al Mundial de Triatlón. JOSÉ LUIZ OUBIÑA
photo_camera Uno de los puestos de la feria celebrada por segundo fin de semana consecutivo en el barrio de Campolongo debido al Mundial de Triatlón. JOSÉ LUIZ OUBIÑA

Los feriantes quieren quedarse en Campolongo. El traslado provisional del mercadillo ambulante al barrio por la celebración del Mundial de Triatlón ha puesto de acuerdo a casi todo el sector, que reclamará formalmente al Concello que traslade de forma definitiva la feria de los sábados al centro de la ciudad. Lo hará a través de una recogida de firmas en las que plantearán la nueva ubicación para atraer más clientela.

"O sitio é cómodo, práctico e céntrico. En todas as cidades de España, as feiras están céntricas. Ademais crea ambiente para a hostalería", afirma Eladio Rodríguez, que lleva 30 años vendiendo calzado.

A Saúl Aarón Jiménez también le convence más Campolongo que orillamar. "Estamos mucho mejor que allá, donde la gente no viene porque está muy lejos", asegura este vendedor del textil.

"Temos que ver todos os puntos de vista, a limpeza ou os accesos", dice Gulías

De la misma opinión es Merchi Paz, que lleva 15 años en el mercadillo ambulante con su puesto de ropa, sostiene que la clientela prefiere el nuevo emplazamiento. "O único malo son os furgóns, que non hai onde poñelos. Eu deixeino en carga e descarga. Aínda así, temos máis xente porque a feira é máis accesible", comenta.

Por su parte, Andrés Franqueiro Baqueiro también tiene claro que hay más oportunidades de negocio en el centro que en Rafael Areses. "Queremos vir para aquí", dice este vendedor de productos cárnicos. "Temos máis xente e, polo tanto, máis vendas. A diferenza é abismal", subraya este ambulante, que lleva cinco años con su puesto. "O sitio é máis abrigado. Sobre todo no verán, xa que naquela explanada (de Rafael Areses) abrásaste. Con estas árbores (en Campolongo) é unha marabilla", añade.

El único de los comerciantes consultados por este periódico en la feria de este sábado que se opone a un cambio de ubicación fue José Antonio Figueiras, de Viveiros Currás. "Aquí, a xente non ten para aparcar. Os Carrefour hai que poñelos fóra das cidades. Aquí hai máis xente paseando que comprando. E o cliente que serve é o que compra. Que fagan, se queren, dúas feiras", explica este vendedor de plantas, al que sus clientas le instaron a replantarse su postura. "Eu nunca vou á feira. En inverno, para cruzar a ponte dos Tirantes hai que roncarlle! Se viñera a Campolongo viría todos os sábados", le replicó Maribel Vázquez.

"O sitio é cómodo, práctico e céntrico. En todas as cidades de España, as feiras están céntricas", reinvindica un veterano vendedor

La decisión definitiva la tendrá el Gobierno local, que se compromete a estudiar la medida. "Temos que estudar todos os puntos de vista e cuestións como a limpeza ou os accesos", reconoció este sábado la concejala de Mercados, Anabel Gulías.

El Concello trató de trasladar el mercadillo ambulante en 2016 de Rafael Areses a los antiguos terrenos de Tafisa. Pero el sector rechazó la propuesta tras ofrecer otra alternativa: ir a la Alameda o regresar a Barcelos, lugar en el que empezó a celebrarse la feria. Dejó de hacerse en esta plaza en mayo de 1988 tras una polémica resolución del entonces alcalde, José Rivas Fontán, que llevó los puestos a la zona de A Xunqueira.

La actual feria cuenta con 78 puestos de venta, de los cuales 45 están ocupados. Los 33 restantes saldrán a licitación este verano por un año, prorrogables por otros diez más.

Comentarios