Una de las investigaciones judiciales más laboriosas de los últimos meses en Pontevedra acaba de concluir con la devolución de la causa a manos de la Fiscalía Provincial de Delitos Económicos, que estudia en estos momentos las últimas diligencias para presentar su escrito de acusación, si procede, o bien solicitar el archivo (lo que se antoja del todo improbable). De las actuaciones realizadas hasta el momento parece segura la presencia de Rafael Louzán, expresidente de la Deputación y del PP provincial, que se sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial para responder por un supuesto delito de cohecho pasivo. Louzán, actualmente máximo responsable del fútbol gallego (preside la Federación), recibió "regalos" por parte de Severino Reguera, diputado provincial y empresario del sector del pan, en forma de alquileres un 60 por ciento por encima del precio de mercado. Esa es la tesis que sostiene el jefe de Delitos Económicos de Pontevedra, Augusto Santaló, que también acusará a Reguera de cohecho (en su caso, activo), y a la esposa de Rafael Louzán, M.T.C., cuya participación en los hechos fue como cooperadora necesaria, si bien este extremo no será aclarado hasta la publicación definitiva del escrito de acusación del Ministerio Público.
UN AÑO DE CÁRCEL. Si, como parece, el fiscal solicita la apertura de juicio oral contra los tres investigados, pedirá penas de un año de prisión para Rafael Louzán y para Severino Reguera. El exjefe del PP provincial se enfrentará, además, a una solicitud de inhabilitación para el ejercicio de cargo público en aplicación del artículo 422 del Código Penal vigente.
La Fiscalía analiza los últimos detalles de un caso que, salvo sorpresa de última hora, concluirá en la Audiencia Provincial
El juicio, que, en su caso, se celebraría en la Audiencia de Pontevedra, se desarrollará mediante el procedimiento que marca la Ley del Jurado, por lo que será un tribunal popular el que, en primera instancia, dictamine la inocencia o culpabilidad de los encausados.
LA ACUSACIÓN. Los hechos que serán objeto de la acusación vienen reflejados en la querella presentada en 2014 por la Fiscalía y admitida a trámite por el Juzgado de Cambados, que se resumen en que el jefe del fútbol gallego adquirió tres locales en el barrio vigués de Navia en el año 2008 que fueron alquilados al poco tiempo por Reguera por un precio de entre 15,7 y 16,4 euros por metro cuadrado, cuando "el local más parecido al suyo, en la misma planta", paga entre 5,9 y 7,2.
"No parece razonable una diferencia tan abultada", subraya el fiscal, que cuantifica en unos 90.000 euros el sobreprecio recibido por Louzán y su esposa de manos de Reguera en el período investigado, tomando como base dos informes diferentes, uno aportado por la Guardia Civil y otro por la Agencia Tributaria.
La acusación entiende que el diputado "regala" a Louzán "importantes cantidades de dinero". El exdirigente del PP declaró desde el principio que los hechos "son un asunto del ámbito privado".
