El fiscal Antidroga, Pablo Varela, mantuvo el viernes en la Sección Cuarta de la Audienccia Provincial de Pontevedra las penas que solicitaba inicialmente para una pareja acusada de un delito contra la Salud Pública y un segundo de tenencia ilícita de armas, por lo que pide penas de doce años y medio de prisión para cada uno de los investigados. Ambos forman parte, señala el Ministerio Público, de un entramado criminal desarticulado de forma conjunta por la Policía Nacional y la Guardia Civil cuya característica más llamativa era el método de ocultamiento de la sustancia estupefaciente, en este caso heroína, que los procesados almacenaban en zulos bajo tierra en puntos como Carballo, Campo Lameiro o Cutián.
La vista oral comenzó meses atrás con la confesión por parte del grueso de investigados, pero la Sección Cuarta de la Audiencia se vio obligada a aplazar para esta semana la comparecencia de la pareja que ahora se expone a la mayor condena, pues en su día alegaron una indisposición para acudir al plenario. En el marco de su interrogatorio, que tuvo lugar el jueves, ambos negaron cualquier implicación con la droga decomisada en el mes de enero del año 2020, cuando tuvo lugar el operativo. Ambos explicaron que desconocían la existencia de la sustancia, que tuvo que ser desenterrada bajo tierra por los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que llevaron a cabo la investigación.
En la jornada del viernes, la Audiencia acogió toda la prueba testifical restante, tras la que el fiscal consideró acreditados los hechos que planteó en su escrito de acusación provisional al inicio del juicio.
En base a ello, elevó a definitivas sus calificaciones iniciales solicitando las citadas penas que suman 25 años de prisión para los procesados, a los que añade una multa de tres millones de euros fijada en base al valor de la droga que fue decomisada.
