Los funcionarios de Pontevedra denuncian "caos" en el juzgado de Violencia sobre a Muller

Alternativas na Xustiza advierte de la falta de medios ante el aumento en un 20% de casos y tras el parón por la huelga de la justicia

Sede de los juzgados de Pontevedra. ADP
photo_camera Sede de los juzgados de Pontevedra. ADP

Trabajadores de los juzgados de Pontevedra denuncian falta de medios ante el aumento de casos de violencia de género. El sindicato Alternativas na Xustiza apunta que en el último año los asuntos derivados al juzgado de Violencia sobre a Muller se incrementaron en un 20%, "mentres que os medios persoais e materias seguen sendo escasos". Añaden que la situación se ha visto complicada después de la huelga de tres meses que se vivió este año. "O Xulgado está de garda todos os días laborais do ano, e todo é urxente, tal e como o recolle a propia Lei Orgánica de Protección Integral as Vítimas. Traballar de maneira eficaz e controlada é imposible, pois hai que conxugar o traballo propio do xulgado de instrución e a propia función de Decano de Instrución na semana de garda", advierten desde la agrupación de trabajadores que tildan de "caos" la situación del juzgado número 3.

"O traballo empeza desde que a vítima entra pola porta, solicitando unha certificación da medida de protección, e pasando pola situación do procedemento para interesar as axudas correspondentes ata a tramitación dos Xuízos Rápidos", señala Alternativas na Xustiza que apuntan que la falta de medios obliga a los trabajadores a, además de asumir tareas de carácter procesal, otras propias de otros profesionales especializados como "escoitar e apoiar psicoloxicamente á vítima, realizar xestións telefónicas, labores de investuigación para dar co paradoiro dunha vítima ou denunciado a través dalgún familiar coñecido; facerse cargo dos fillos das vítimas mentres estas declaran, tratar de tranquilizalas ou evitar que se atopen denunciado e vítima nas oficinas xudiciais".

En el caso concreto de los juzgados de Pontevedra, el sindicato subraya que entre los principales déficits; la carencia de salas necesarias en un juzgado con una temática tan especial como es la violencia de género; las víctimas están todas juntas en una sala minúscula en la que no tienen apenas intimidad. A su vez, según Alternativas na Xustiza, los imputados comparten otra sala, lo que supone un problema grave ya que el detenido tendría que permanecer custodiado solo en dicha sala. Los testigos no tienen un lugar específico donde esperar por lo que es probable que se encuentren con alguna de las partes.

Apuntan además a la complicación que plantea a los funcionarios la gestión y trámite de las pulseras telemáticas y el seguimiento de las incidencias. Los trabajadores recuerdan además que el juzgado número 3, al no ser exclusivo, tiene atribuidas las funciones propias de un Juzgado de Instrucción como juzgado de guardia juicios rápidos, entre otras.

Menores. Urgen más rapidez cuando hay niños de por medio
Uno de los puntos más sensibles que aborda el juzgado de Violencia sobre a Muller, según denuncian los sindicatos, tiene que ver con los menores. En los asuntos penales, recuerda Alternativas na Xustiza, se acuerdan medidas civiles por un periodo de 30 días prorrogables cuando una de las partes presenta una demanda. Se tiene que celebrar juicio civil y resolver medidas provisionalísimas con carácter urgente. "A situación dos menores, como consecuencia da falta de medios materiais e persoais, non se pode resolver coa rapidez necesaria para que os nenos sufran o menos posible a problemática", señalan.

Comentarios