O Graneiro de Amelia crece en plena crisis con dos nuevas aperturas en Palma y Madrid

El grupo de empresas pontevedrés, que vende a granel productos de alimentación y cosmética natural, presume de una clientela fiel
Edgar Ramírez y Marcos Otero, con dos empleadas, en la inauguración de la tienda de Palma. CEDIDA - O Graneiro de Amelia
photo_camera Edgar Ramírez y Marcos Otero, con dos empleadas, en la inauguración de la tienda de Palma. CEDIDA

O Graneiro de Amelia, la empresa nacida hace ocho años en Pontevedra con una fuerte apuesta por la venta a granel de productos alimenticios, se expande en plena crisis con la apertura de dos nuevas tiendas en Palma de Mallorca y Majadahonda (Madrid). Son sus primeras franquicias fuera de las fronteras gallegas, bajo la marca Granalia. Es la tercera firma del ahora grupo, bajo cuyo paraguas se cobijan también O Graneiro, el herbolario Sra. Florinda y Spain Bulk Quality, "a distribuidora nacional que achega aos produtores locais ás grandes cidades", explica Edgar Ramírez, uno de los fundadores de O Graneiro de Amelia junto a Marcos Otero. Spain Bulk gestiona también la tienda online.

Las dos nuevas aperturas en territorio español se suman a los doce establecimientos en Galicia, situados en las grandes ciudades y villas medianas y su filosofía, al igual que la de las primeras tiendas, se basa en la venta de productos naturales y en llevar "os antigos ultramarinos, modernizados, ao centro das cidades", como los que se encuentran en Loureiro Crespo o Riestra, en Pontevedra.

A los dos Granalia podría sumarse a corto plazo Sra. Florinda, "pois ten moita demanda".

"Levamos un cachiño de Galicia"
La oferta de más de mil referencias de productos que se contabilizaban hace dos años, se completó con cosmética natural (bajo la marca Rabudo) y más opciones de alimentación, todas ellas "con nome galego" cuya acogida está siendo excepcional, que se suman a los productos con marca propia como vinos, mermeladas y chocolates. "A xente demandábao e imos ampliando a gama". "Traballamos con laboratorios, testamos as fórmulas e sacámolos ao mercado". Solo O Graneiro suma casi 40 empleados.

La acogida en Palma y Majadahonda está siendo muy buena. "Mantemos a esencia galega nos locais, na estética, con produtos como albariño, mencía ou conservas das Rías Baixas... Hai moito galego por alí que mesmo se emociona".


Ramírez apunta que la pandemia del coronavirus trastocó los planes iniciales, aunque no influyó definitivamente en el buen devenir de la aventura. "Estaban para abrir en marzo, xusto a fin de semana que se decretou o estado de alarma. Retrasou as aperturas, que finalmente foron en maio".

En todo caso, son ejemplo de una empresa que, en plena pandemia, no solo no cerró sino que abrió nuevos locales.

"O proxecto levaba xestado moito tempo e non podía ir para atrás", hecho al que se suma que "tampouco vemos que o estado de alarma sexa un problema para nós. A xente vai seguir tentando comer san e manter a liña. E nós cremos que somos unha empresa sólida para seguir adiante sen problema", destaca.

MEDIO AMBIENTE. La filosofía del cuidado por el medio ambiente es la pieza clave del proyecto y ocho años después Ramírez considera que "si cambiamos moito a filosofía de compra da xente, fomos pioneiros en Galicia e notamos que a xente demanda cada vez máis, pero queda moito por percorrer" en la lucha contra el plástico y materiales de un solo uso. "Somos conscientes diso, de que é inevitable que se esté utilizando máis plástico, pero volveremos á normalidade, a intentar que se reduza o máximo posible".

Las medidas de higiene y seguridad ya eran habituales en sus tiendas, aunque ahora "adaptámonos a todas as indicacións" de Sanidad. Durante el confinamiento sí se notó un bajón de clientes. "A xente tiña moito medo. Case todos os nosos locais están nos cascos vellos, en pleno centro turístico, e a demanda baixou, porque había que ir ao súper máis próximo". Aun así, confiesa, "temos clientes habituais que escapaban da súa zona para virnos comprar. Aí decátaste de que o estás facendo ben" y que su filosofía y sus productos no se encuentran en cualquier establecimiento convencional.

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