El nuevo albergue que Cáritas construye en la calle Joaquín Costa recibió este lunes una visita muy singular: la del obispo auxiliar de Santiago, Francisco José Prieto Fernández, que departió durante más de una hora con los responsables y los voluntarios locales, a quienes dirigió palabras de alabanza y agradecimiento.
"Decir Cáritas es hablar de voluntarios, que le ponen rostro a esta labor solidaria. Decir Cáritas siempre es comprobar que el tú a tú no se pierde, que la cercanía siempre estará ahí. Esa es la identidad de Cáritas y he comprobado que en Pontevedra esto no se ha perdido. Que quien llame a la puerta abierta que es Cáritas, será escuchado y atendido. Y en Pontevedra eso se cumple. Porque todos somos Cáritas", manifestó ante una treintena de colaboradores.
El acto comenzó con unas palabras de Conchi Vázquez, directora de Cáritas Interparroquial de Pontevedra, quien reconoció la ilusión que le hizo recibir, hace dos meses, la llamada del obispo auxiliar mostrándole su interés por conocer las instalaciones capitalinas. "Eso dice mucho de su sensibilidad y compromiso hacia los más vulnerables", dijo.
Está previsto que la primera fase de las obras, que incluye el nuevo albergue, se estrene antes del próximo verano
Recordó que cuando el actual equipo directivo inició su andadura en julio de 2019, "estábamos abrumados por la responsabilidad, pero con una enorme ilusión". En marzo de 2020 llegó la pandemia y "hubo que cerrar puertas físicas y desarrollar la atención de otra manera".
Un cambio en el que los voluntarios tuvieron un enorme protagonismo. "Nunca les agradeceremos lo suficiente su entrega", proclamó Conchi Vázquez.
También se refirió al proyecto estrella de Cáritas en Pontevedra: su nuevo albergue. "Después de muchos desvelos, estamos a punto de finalizar la primera fase. Nuestra prioridad es la acogida y la atención a las personas, eje central labor de Cáritas. Después llevamos a cabo cursos de formación laboral, ropero, microhuertas en Lérez etc.", agregó.
La entidad también promueve otras iniciativas, como cursos de formación del voluntariado, atención y escucha a personas en situación de exclusión, etc.
"Nos preocupa el desempleo, la falta de vivienda asequible, las lentitudes burocráticas, la sustitución de la atención personalizada por máquinas en la sanidad", expuso la responsable de Cáritas, tras expresar un deseo: "Nos gustaría llegar más a las parroquias".
Acto seguido, los distintos voluntarios fueron presentándose al obispo auxiliar y explicando la labor que realizan.
La trabajadora social Paula Tilve repasó los proyectos de atención primaria para personas que llegan a Cáritas y servicios como el ropero para gente sin hogar, bolsa de empleo, cesión de muebles, microhuertos cerca del monasterio Lérez para autoconsuno de quien los trabaja, vivienda de acogida para gente sin recursos, orientación jurídica...
Posteriormente, todos los presentes efectuaron un recorrido por las instalaciones, cuya primera fase se prevé estrenar en verano.
