Ilusión y paciencia en las jugueterías pontevedresas ante la llegada de los Reyes

Los comercios de artículos lúdicos para niños apuran su semana más intensa del año con los encargos para los Magos de Oriente ▶ Colas enormes en los establecimientos y también en las calles, donde los atascos en la circulación fueron notables todo el día

La jugutería Din&Don, con numerosa afluencia de público en la jornada del miércoles. DAVID FREIRE
photo_camera La jugutería Din&Don, con numerosa afluencia de público en la jornada del miércoles. DAVID FREIRE

"Esta semana estamos a tope. En Pontevedra somos más de Reyes, así que tenemos abierto todo el día", explica Carla Fernández, dependienta de EurekaKids. En el establecimiento que la cadena de juguetes educativos tiene en la ciudad se nota, y mucho, el ajetreo de clientes, aunque quizás no tanto como en las jugueterías más convencionales, con enormes colas tanto en las cajas como en los mostradores de empaquetado.

Aun así, Fernández marca la diferencia. "Ofrecemos juguetes para que los niños se impliquen y cada vez más la gente apuesta más por juegos didácticos. Los niños piden más lo que ven en la tele, pero después prefieren aquellos con los que tienen que interactuar". Además, destaca que "el trato personalizado a los clientes" y el asesoramiento es una baza para que vuelvan.

En otra de las franquicias de la ciudad, Imaginarium, también notan el tirón de la semana de Reyes, aunque las compras fueron más escalonadas gracias a los descuentos del Black Friday, que atrajeron a los compradores más madrugadores. Al frente, Alberto Silvestre destaca el éxito de artículos como la Neomoto (un correpasillos para bebés de 59,95 euros), un parque de bolas de 32,95 y la bicicleta rosa con cesto de 129 euros. Los instrumentos musicales; los utensilios de oficios como médicos, policías, bomberos o maquilladores también son clásicos que siempre triunfan, sin olvidar los artículos más tecnológicos como drones y robots.

En sus estanterías no se encontrarán, sin embargo, los juguetes más solicitados estas Navidades. Ni en esas ni en las de establecimientos como Juguettos o Din&Don, en los que están "agotadísimos", explican sus dependientas en los escasos minutos en los que pueden atender a la prensa ante la avalancha de clientela. La situación les obliga no solo a aumentar plantilla, sino también a extender el horario a casi doce horas diarias.

NI EN FOTO. ¿Y cuáles son esos artículos que ni siquiera los Reyes podrán encontrar ya a pesar de su magia? Si los de Oriente no fueron previsores no hallarán ni una sola L.O.L. Surprise, agotadísima a pesar de costar casi cien euros. Se trata de una bola que lleva dentro varias muñequitas con sus complementos y cuya gracia está en la intriga de ir desembalando continuas capas hasta llegar al contenido. Ni en pintura.

Tampoco hay ya la Slime Factory, una fábrica casera de blandiblú a base de polvos de colores, brillantina y agua que hace furor entre la chavalada. En Din&Don están agotados los Bebés llorones, unos muñecos que "lloran de verdad", según reza su publicidad, mientras que en Juguettos ya no despachan los iwat board skate (a pesar de costar casi 170 euros o 200 con asiento).

Más allá de estas novedades, no dejan de triunfar los clásicos como coches y muñecas, que cada vez se venden más para niños y niñas indistintamente, y juguetes de los dibujos animados más reconocidos, como Ladybug, PJ Mask o la Patrulla Canina.