El ámbito educativo tampoco es ajeno a las nuevas restricciones. Alumnado de las facultades de Pontevedra y Vigo mostraba este martes su malestar ante el anuncio de la Universidad de mantener la presencialidad de los exámenes. Aunque desde la institución educativa se señaló el pasado lunes que la medida obedece a garantizar la igualdad de oportunidades entre los alumnos, son muchos los que consideran que "é máis incoherente aínda que antes, porque agora xa saben que é preciso evitar absolutamente calquera contacto persoal non esencial para poder frear a pandemia que se levou por diante a moitas persoas, tamén das nosas propias familias, coma no meu caso co meu avó", manifestó el martes Pablo Abelleira, delegado de facultad en el campus de Pontevedra. Para este estudiante de Dirección e Xestión Pública las medidas "chegan tarde, mal e arrastro". En la misma línea se pronunció la asociación estudiantil Anega que censuró la decisión de las universidades gallegas que, consideran, poner en riesgo la salud del alumnado tanto en los desplazamientos como en las aglomeraciones que se producen en la entrada y salida de las pruebas.
ACADEMIAS. La incertidumbre acompañó este martes durante todo el día a los propietarios de escuelas no oficiales y academias, que tuvieron que contestar al teléfono a sus clientes con los hombros encogidos. Escuelas no oficiales y academias aguardaban conocer al detalle el contenido del Diario Oficial de Galicia para saber hasta qué punto les afectan las nuevas restricciones. "A incerteza é absoluta estámonos informando pola prensa", manifestó Kiko da Silva, propietario de la escuela de ilustración O Garaxe Hermético en Pontevedra antes de conocer que podrá mantener sus puertas abiertas. "Onte chamei á CIG Ensino e non podemos saber, ata que saia publicado. Iso é un lío porque non nos queda marxe de maniobra", añadió. Nueve trabajadores y medio centenar de alumnos estaban este martes a la espera de conocer si finalmente esta mañana podrían ir a clase o por el contrario se volverían a activar las clases telemáticas como ya hicieran la pasada primavera durante el confinamiento. "Tampouco sei se podo darlle as extraescolares ós cativos que damos polas tardes", añadió Da Silva, que se mostró crítico con la falta de información "e a improvisación que demostran".
En una situación similar se encontraban los propietarios de academias de la ciudad. Manuel Touriño, fundador y gerente de Academia Ensíname confirmaba en la tarde de este martes que su empresa también tiene preparado "un plan b" por si "al final hay que activar la formación online de un día para otro". Esta academia de inglés imparte clases a 400 niños de distintas edades entre Pontevedra y Vigo . A su vez ofrecen cursos en empresas. "Estas restricciones nos afectan mucho, pero ahora mismo tenemos todo en el aire", manifestó Manuel Touriño antes de conocer que, pese a que se prima la formación telemática, las academias podrán tener abiertas sus puertas aunque con el aforo reducido al 50%.
También durante la primera ola de la pandemia y el confinamiento Ensíname impulsó la formación online con éxito entre su alumnado. Ahora, creen, será más sencillo que entonces. "La gente está más concienciada pero es cierto qe hay una brecha digital muy grande. En marzo había gente que no tenía ni portátil ni wifi", señaló.