Una gran operación conjunta desarrollada en varias provincias españolas por la Guardia Civil y los Mossos d'Esquadra de la Generalitat de Cataluña ha vuelto a poner el foco sobre empresas dedicadas al sector de la náutica de la provincia de Pontevedra, que, según fuentes de la investigación, tendrían un papel relevante a la hora de suministrar piezas para la construcción de narcolanchas que acabaron introduciendo toneladas de hachís desde Marruecos y, al mismo tiempo, para blanquear los ingentes beneficios de la estructura criminal desarticulada.
La empresas náuticas legales, según revelan las autoridades, "daban cobertura y fiabilidad a las operaciones comerciales" de la red delictiva. Los investigados adquirían así el material náutico necesario para la fabricación de sus narcolanchas: motores de gran potencia, aparatos de navegación y comunicación que les permitían realizar grandes desplazamientos marítimos. "Los arrestados blanqueaban las ganancias de sus operaciones a través de estas mismas empresas", destacan Mossos y Guardia Civil.
En el marco de la investigación, en febrero de 2023 los investigadores obtuvieron información relevante gracias a la cual pudieron intervenir en Tossa de Mar (Cataluña) una partida de hachís de cerca de dos toneladas transportados en una lancha rápida por la organización desde el norte de África. Este desembarco lo organizó el grupo criminal investigado, que supervisó directamente su ejecución. El operativo logró interceptar la droga pero las personas que se encargaban de la operación lograron huir. Los investigadores constataron que la organización criminal habría utilizado lanchas para otros desembarcos de hachís, como el ocurrido en las costas de Almería a inicios de marzo, en el que la Guardia Civil intervino cerca de dos toneladas de hachís y detuvo a siete personas.
El desembarco generó información de interés policial que, en parte, permitió al equipo de investigadores la detección de un entramado empresarial dedicado a blanquear el dinero, financiar las actividades de la organización e intentar justificar la compra del material necesario para la construcción las embarcaciones de alta velocidad. Así, los investigados hacían el transporte con las embarcaciones y también el blanqueo de dinero que conseguían de sus actividades. Fue el 15 de marzo cuando se realizaron las acciones policiales en Pontevedra.
