La Audiencia de Pontevedra juzgará el próximo jueves a un sargento de la Guardia Civil que está acusado de aprovecharse de su cargo para apropiarse de dinero de personas que acudían a formalizar denuncias. Por estos hechos, la Fiscalía solicita que sea condenado a nueve años y tres meses de prisión por los delitos de apropiación indebida, omisión del deber y falsedad en documento público.
El guardia civil estaba destinado en el cuartel de O Covelo, en donde ejercía como comandante, según señala el fiscal en el escrito de acusación, que explica como engañaba a las víctimas y no formalizaba los atestados. La investigación sobre la actividad del acusado parte de dos episodios, ambos en 2015, relacionados con conflictos vecinales por la tala de unos árboles.
En los dos casos, sendas personas acudieron al cuartel para presentar una denuncia ante las desavenencias por el coste por los trabajos de una tala y, en lugar de elaborar atestado y presentarlo en los juzgados, habría utilizado esa información para cobrar dinero. El entonces responsable del puesto de O Covelo llamaba por teléfono a los denunciados ay les pedía que le entregasen el dinero pendiente para arreglar las cosas y evitar una investigación oficial. De esa forma se hizo con unos 2.900 euros, de los que acabó devolviendo 2.000 cuando uno de los afectados le denunció.
Junto a la cárcel, el fiscal pide que el guardia sea inhabilitado para ejercer su trabajo y que devuelva el dinero.
